El pacto que permitió que el AVE llegase a Valencia
El 8 de enero de 2001 José Bono condicionó el trazado de la línea pero se desbloqueó el proyecto de conexión en alta velocidad
Francisco Ricós
Sábado, 20 de junio 2015, 23:18
Cuando Julián Quirós, mi director, me preguntó en una reunión con qué noticia me quedaba de todo lo que he escrito en LAS PROVINCIAS, no dudé: la cumbre de Murcia, el pacto que permitió la llegada del AVE a Valencia. No fue una exclusiva pero eso poco importa si lo que cuentas trasciende.
Sucedió el 8 de enero de 2001, en la sede del gobierno murciano que presidía Ramón Luis Valcárcel. Manolo Lloret, veterano fotógrafo de LAS PROVINCIAS, se subió a mi coche y enfilamos de buena mañana hacia Murcia. En el palacio de San Esteban se reunieron con el anfitrión el ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos; el presidente madrileño, Alberto Ruiz Gallardón; el de Castilla-La Mancha, José Bono y Eduardo Zaplana, presidente de la Generalitat. Se tenían que poner de acuerdo en una sola cuestión: el trazado del tren de alta velocidad entre Madrid y Valencia.
Bono, el presidente castellanomanchego que más trabas ha puesto al desarrollo de las infraestructuras que conectan a los valencianos con Madrid -la autovía y el AVE-, se negaba a que Valencia tuviera la línea férrea directa con la capital de Estaña. Insistía en que pasara por Albacete.
Zaplana se reunió con Bono de camino a Murcia y empezó a cerrar el acuerdo: habría AVE para todos. Bono puso su condición: el AVE directo Madrid-Valencia no empezaría a funcionar antes que la línea de Albacete y el trazado tendría que pasar por Cuenca. A media tarde se anunció formalmente el acuerdo.
A finales de junio de 2010 mi director me llamó al despacho: «Te vas a Política. ¿Estás contento?» Ante su sorpresa le dije que no. «¡Pero si es la mejor sección!», afirmó. «Sí, ya, pero quiero inaugurar mi AVE. He contado la planificación, el diseño y cómo se construía. Han pasado tres ministros de Fomento, dos presidentes del Gobierno, tres de la Generalitat y dos consellers de Infraestructuras. Ahora me toca inaugurarlo», contesté. «No te preocupes que la inauguración es tuya».
Pasé a Política pero a la hora de inaugurar el AVE, yo estaba allí, como en Murcia casi diez años antes. El 18 de diciembre de 2010, un día frío, gris y maravilloso, cerró el círculo que se empezó a dibujar el 8 de enero de 2001 en el palacio de San Esteban. Y yo lo conté.
