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Juan Carlos Valldecabres
Lunes, 11 de enero 2016, 12:47
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La derrota en Anoeta ante la Real Sociedad ha dejado tan tocado al Valencia que esta mañana en la ciudad deportiva de Paterna el entrenador se ha encerrado en el vestuario con sus jugadores para analizar la situación. El entrenamiento estaba previsto que comenzara a las once de la mañana pero no ha sido hasta casi tres cuartos de hora después cuando la plantilla ha saltado al césped. Primero lo ha hecho Neville junto con sus ayudante y minutos después el grupo de futbolistas, por lo que se supone que estos han podido también tener su propia sesión de terapia en el interior del vestuario.
El 2-0 contra la Real ha supuesto un frenazo brusco en las aspiraciones del Valencia de recuperar la sintonía que parecía apuntar desde la llegada de Neville. El equipo está tan lejos de la Champions que hoy en día parece casi imposible conseguir ese objetivo y sólo queda aferrarse a tratar de coger plaza para la UEFA Europa League mientras se sigue vivo en el camino de Copa y de la presente edición de la segunda competición continental. Neville salió muy disgustado de Anoeta y de ahí que esta mañana haya querido junto a sus futbolistas extraer conclusiones en un intento casi a la desesperada de encontrar el revulsivo que no llega. Este jueves el Valencia tiene el partido de vuelta de la Copa del Rey y con el 4-0 de la ida la eliminatoria de octavos ante el Granada puede suponer al menos un cierto alivio en la situación tan dramática que se vive en la Liga.
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