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El primer empujón de Layhoon
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El primer empujón de Layhoon

Santi Mina, la única cara nueva de este primer día de entrenamiento, llega con las ideas claras: «No dudé ni un segundo de fichar por el Valencia»

Juan Carlos Valldecabres

Lunes, 6 de julio 2015, 00:15

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El nuevo Valencia ya comienza a sudar y esta vez no por los vaivenes internos sino por el trabajo de sus verdaderos protagonistas. Aunque se respira un esfuerzo por inyectar cierta vuelta a la calma ante la entrada de una nueva etapa, cuesta alejarse de las sensaciones un tanto extrañas que todavía envuelven la realidad valencianista. Es normal, por ejemplo, que la presidenta del club dé formalmente la bienvenida a los futbolistas en su arranque de pretemporada pero lo atípico es que ese acto sea en inglés, que se haga con la ausencia del director deportivo (el vacío que deja Rufete) y que coincida además con la despedida de quien hasta ahora ha hecho de nexo de unión entre el vestuario y la propiedad. Layhoon Chan y Nuno hablaron a los jugadores y ambos lo hicieron en presencia de Amadeo Salvo, que junto con Manuel Peris acudió a Paterna a cerrar con esta visita los actos del adiós.

Uno, Salvo, les pidió con cierta emoción a los futbolistas que siguieran creyendo en el proyecto, mientras que Layhoon, después de dedicar unas palabras de agradecimiento hacia el exdirectivo por su labor, trató de dar el primer empujón de la temporada: «Vamos adelante».

Esto sucedía a primera hora de la mañana, horas antes de que Zakaria Bakkali se recluyera en la habitación de un hotel en Valencia a la espera de firmar su nuevo contrato. Este habitual reencuentro veraniego del vestuario tan sólo tuvo una cara nueva, la de Santi Mina. El Valencia ha dado de manera repentina un acelerón. El sábado 'caía' Mina y ahora Bakkali. Dos futbolistas de un perfil de similares características: jóvenes y a los que se les supone una importante proyección deportiva. Faltan eso sí dos piezas importantes todavía en el puzzle de Nuno: el portero y el mediocampista.

A la espera pues de que se cierre lo antes posible estos dos importantes frentes, la atención por ahora se la lleva la notable presencia de los chavales del Mestalla (hasta once canteranos trabajan a las órdenes de Nuno); la vuelta de Fede Cartabia y Robert, con pocas opciones ambos de quedarse (el primero fue a menos en el Córdoba y el segundo ganó experiencia en el Granada); el papel que van a tener los veteranos como Negredo, Parejo y Javi Fuego (casi siempre juntos); la incomodidad de los porteros (Yoel y Jaume Doménech) que saben que se va a fichar a un guardameta para que sea titular; las ganas de triunfar del recién llegado (Santi Mina); los avances de André Gomes en la recuperación de su lesión; y la presencia en el cuerpo técnico de Phil Neville.

Para no perder la costumbre, Nuno prefirió abrir únicamente la sesión durante quince minutos. Los jugadores habían pasado antes de saltar al césped por el gimnasio donde les hicieron diferentes pruebas físicas y médicas. El tono general que se observó fue que los jugadores han llegado bastante finos en lo que al peso se refiere. O eso o que la nueva equipación de trabajo que estrenaron da esa sensación. Ha cambiado el tono del naranja de las camisetas, mucho más chillón el de ahora. El pantalón pasa del negro al azul mar; y los técnicos dejan las camisetas azules para vestir de riguroso negro.

También ha variado la ropa de paseo. Santi Mina fue el primero en lucirla cuando acudió a la sala de prensa para hacer el acto de presentación. Allí, en lugar de que hiciera de anfitrión el responsable deportivo que es quien expone las razones que han motivado el fichaje (con la salida de Rufete todo pasa por Nuno), este papel correspondió a Layhoon. Pero a la presencia de la presidenta hay que añadir un gesto que no pasó desapercibido y que demuestra la nueva política de acercamiento que se pretende hacer desde la dirección. Una vez acabó el acto, Layhoon fue saludando uno por uno a los periodistas allí presentes. Ya dijo la presidenta el día del cese de Salvo que posiblemente una de las cosas que debían mejorar era el tratar de hacerse entender. Sin Salvo y a la espera de que el Valencia elija a una figura que pueda representar un papel importante de cara a la afición y los medios (Juan Sol también estuvo presente), Layhoon se ha propuesto tomar la iniciativa en ese sentido. Lo primero que hizo, de hecho, fue reunirse con los representantes de las peñas el viernes.

A ellos ya les dijo lo que poco menos que se ha convertido en el mensaje de cabecera, algo que ayer volvió a repetir. «Estamos convencidos que en los seis años -se refería a la duración del contrato de Mina- va a dejar huella. Va a ser de una gran importancia en nuestro club. Nuestro proyecto para el Valencia es a largo plazo, de varios años y tener jugadores jóvenes y de largo recorrido encajan en esta idea».

A su lado, y con el riesgo de quedarse en fuera de juego por aquello del inglés, Santi Mina sonreía expectante. «Es un futbolista de quien los técnicos han destacado porque es muy versátil, capaz de jugar en varias posiciones y que nos va a dar valor en la plantilla».

En lo de la posición a ocupar el ex del Celta lo tiene bastante claro. Chico para todo. «La posición me da igual, me acostumbro tanto a jugar por la izquierda como por la derecha. Luis Enrique me ponía de delantero centro, pero no tengo ninguna que me guste en especial. Con tal de ayudar al equipo y tener minutos para mí es importante», afirmaba.

Admitió que Nuno no había hablado con él con anterioridad a verlo en el vestuario pero de la misma forma reconoció que todo se gestó en la última semana, a pesar de que desde hacía un tiempo sabía que su destino -Jorge Mendes- podía estar lejos de Vigo. «No lo sabía desde hace mucho. Sabía que había cosas, que algún equipo estaba interesado. Hace dos días me comentó -su agente- que estaba casi hecho la operación y no dudé ni un segundo en venir aquí. Sé que el Valencia es un paso importante en mi carrera, un proyecto nuevo y muy ambicioso. No dudé en venir aquí. Sé que es complicado jugar pero estoy para ayudar al equipo».

Conocía a Yoel del Celta y a Gayà y a Salva de la selección. «Me dijeron que era un club increíble, que la afición siempre está apoyando. Es un club muy cercano al jugador, que siempre te arropan. Nuno me ha dicho que trabaje como uno más, que me acomode lo antes posible, que me deje la piel en el campo. Quiero seguir creciendo», añadía Mina.

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