El Valencia pagará hasta 17 millones por Rodrigo Caio, otro jugador de Mendes

Rodrigo Caio se ha convertido en el primer refuerzo del Valencia 2015-16. Justo cuando Rufete más empeño ponía en hablar de Imbula y de las intenciones del club de Mestalla de sentarse a negociar con el Olympique de Marsella para tratar el fichaje del centrocampista belga, surge de repente el nombre Rodrigo Caio, un brasileño con pasaporte italiano que actúa como mediocampista defensivo y también como central y que procede del Sao Paolo. Otro 'producto' de Jorge Mendes, de quien precisamente la ESPN en Brasil decía que había adquirido esta misma semana los derechos federativos de Caio con el objetivo de colocarlo en algún club europeo. No ha tardado pues en encontrarle acomodo, a pesar de que formalmente el agente del futbolista es Paulo Luizao, aunque trabajaba de hecho para el 'súper representante' portugués, socio de Peter Lim y hombre cada día más vinculado al devenir del Valencia CF.

La noticia del inesperado fichaje blanquinegro saltó primero en Brasil. La dio oficial ayer a media tarde el Sao Paolo, club de origen del jugador, y pilló por sorpresa al mismo Valencia. El club de Mestalla anunciaba su incorporación tres horas después en una escueta nota de prensa de apenas tres líneas en la que hacía mención al condicionante de la pertinente revisión médica. A Rodrigo Caio se le espera en Valencia, de hecho, este próximo lunes y lo de la revisión médica que señalaba la entidad blanquinegra adquiere cierta importancia teniendo en cuenta que en abril de 2014 sufrió la rotura del cruzado de la rodilla, la misma lesión que ahora mantendrá apartado varios meses a su compatriota Diego Alves. De hecho, el año pasado Mendes trató de llevar al futbolista al Mónaco pero esa grave lesión frustró finalmente el fichaje.

El Sao Paolo llegó a informar incluso de las cifras en las que se ha cerrado la operación, que podría vincular al joven al Valencia al parecer hasta junio de 2020 (tenía contrato con el conjunto brasileño hasta 2018). El fichaje asciende a 12,5 millones de euros más otros cuatro millones que corresponden a diferentes variables, cifras algo menores de los 19 en los que se hablaba de que podía cerrarse la contratación de Imbula, un jugador sobre el que Rufete tenía especial interés porque podía aportar la suficiente calidad y músculo al medio del campo blanquinegro.

Si el mánager general deportivo del Valencia respalda al cien por cien y sobre todo los términos en los que se ha cerrado esta reciente operación es algo que abre ahora todo tipo de interrogantes. Por cargo Rufete debe apoyar el fichaje, como también el propio Amadeo Salvo. Sin ir más lejos, ambos no veían con agrado esos 15 millones que se van a pagar por Joao Cancelo.

De Rodrigo Caio, a quien se le había llegado a vincular hace apenas unos días en el Atlético de Madrid, llama la atención su juventud (a punto de hacer 22 años en agosto) y, por supuesto el precio que se va a pagar, de confirmarse las cifras que publicitó en sus medios oficiales el Sao Paolo y que no mencionó el Valencia. Los dos últimos brasileños que han pasado por el Valencia (Vinícius y Filipe Augusto) han tenido bastantes dificultades para adaptarse a las exigencias valencianistas, que prepara encima para agosto su asalto a la Champions. Vinícius tuvo que buscar acomodo al Standard de Lieja donde aportó bastante poco y Filipe Augusto tuvo que regresar al Río Ave prácticamente inédito.

Sin embargo, de Rodrigo Caio los informes que se tienen apuntan a que se trata de un futbolista muy interesante. Aunque su posición predominante es la de pivote, posee un buen trato de balón, un alto porcentaje de acierto en el pase y tiene cierto dinamismo en su juego. En el Sao Paolo llegó a jugar como tercer central y también ha desempeñado la función de lateral derecho. Físicamente (1,82 m.) no es tan poderoso como, por ejemplo, Otamendi.

Realmente, en sus inicios Rodrigo Caio actuaba como delantero y su ídolo era Ronaldo; pero es en esa posición de pivote y de defensa donde más tiempo se ha desenvuelto en el Sao Paolo, club con el que debutó en la máxima categoría en 2011. Su rendimiento le ha llevado a vestir la camiseta de la selección brasileña tanto sub-20 como sub-23. Si Nuno lo quiere para el centro del campo puede ser un buen recambio de futuro para Javi Fuego mientras que si el portugués lo quiere como defensa central, quien queda en una difícil tesitura es Rubén Vezo. A ver qué pasa con Otamendi.