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El Ensanche, Extramuros y Pla del Real son los distritos con más decibelios

P. M.

Sábado, 20 de enero 2018, 00:51

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valencia. El mapa del ruido se para a analizar la estadística de la contaminación acústica por viviendas y zonas de la ciudad. De esto último, los distritos del Ensanche, Extramuros y Pla del Real resultan los más ruidosos, mientras que los que presentan una afección más baja son las pedanías que rodean la ciudad y los Poblados Marítimos.

Sorprende esto último al tratarse de un área dentro del casco urbano, aunque el motivo se debe seguramente a la despoblación de muchas de sus calles, unido al hecho de que no hay grandes ejes viarios que eleven los decibelios hasta afecta a la media del distrito.

En cuanto a las viviendas, los datos del mapa del ruido conocido ayer indican que un total de 81.480 se encuentran en zonas con registros de más de 55 decibelios por las noches, lo que se considera ya contaminación acústica. En las otras franjas horarias, 40.830 se encuentran en el tramo de la mañana y 39.320 en el de la tarde.

La normativa actual no obliga a contemplar las horas de la tarde ni la media de las 24 horas (donde el algoritmo tiene más incidencia en la tarde y la noche). Aún así aparecen en el documento y en este último apartado se encuentran 73.720 viviendas de Valencia, una cifra que trasladada a habitantes arroja un balance de 184.900 vecinos.

Al margen de los distritos y pedanías citados, el resto se enmarca en una afección media-alta, como son Campanar, Zaidía, Olivereta y Patraix, mientras que en las horas de la noche se suma Quatre Carrreres y Patraix. De afección media-baja son Ciutat Vella, Jesús, Algirós, Benimaclet, Rascanya y Benicalap, además del Marítimo en el horario nocturno.

Los autores apuntan que en cada distrito el ruido por la mañana y la tarde es similar, aunque es durante el horario nocturno cuando se dispara respecto al resto de las mediciones. La contaminación acústica nocturna se consolida como un problema pese a la reducción del último lustro, a lo que hay que añadir las quejas vecinales por la proliferación del botellón y la saturación de terrazas de bares.

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