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Traslado de una paciente en la entrada a Urgencias del Clínico en una imagen de archivo. irene marsilla
El Clínico se colapsa tras el cierre  de camas por la campaña de verano

El Clínico se colapsa tras el cierre de camas por la campaña de verano

Trabajadores denuncian que la sala de preingreso se mantiene abierta y en Urgencias ocho pacientes esperan habitación para ingresar

LAURA GARCÉS

VALENCIA.

Viernes, 6 de julio 2018, 00:38

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El verano y las medidas que con la llegada del periodo de vacaciones aplica la Conselleria de Sanidad para afrontar la asistencia en los centros sanitarios de la Comunitat, ya pasa factura al Hospital Clínico de Valencia. En el complejo sanitario de la avenida Blasco Ibáñez la sala de preingreso habilitada para situaciones de especial presión asistencial se vio ayer llena, con ocho pacientes, además de que en la unidad de Urgencias, en torno a la una de la tarde otros ocho enfermos estaban pendientes de que se les asignara cama para poder ingresar, tal como denunció el sindicato UGT.

José Santamaría, representante de la formación sindical, explicó que en el hospital «se han cerrado 40 camas» por el plan de verano, circunstancia que a juicio de UGT ha desencadenado que ayer se saturara la capacidad para absorber pacientes que requieren ingreso, pese a que «la actividad en Urgencias no era elevada».

El representante sindical tras apuntar la concurrencia de estas circunstancias destacó que se mantiene abierta el área de preingreso que se habilitó en una sala de espera para afrontar situaciones especiales de presión asistencial. Este espacio, con capacidad para acoger ocho camas, ayer se encontraba «al cien por cien». Santamaría aclaró que el hecho de que esta sala estuviera completa suponía que no había camas para agilizar los ingresos, ya que ese espacio «se habilita como medida excepcional y si se mantiene es porque la necesitan».

Además, a la misma hora, aseguró que en el servicio de Urgencias «ocho pacientes están pendientes de cama», de los cuales cinco eran «enfermos que requieren aislamiento por contacto y uno de ellos lleva 48 horas en espera de habitación individual».

La Conselleria de Sanidad a primera hora de la tarde destacó que en las instalaciones sanitarias de la avenida Blasco Ibáñez, había «un paciente pendiente de asignar cama que requiera de aislamiento. La dirección del hospital ha habilitado a este paciente un box provisional de hasta que se le asigne cama» a lo largo del día de ayer. En cuanto a la presencia de ocho pacientes en la sala de preingreso, la misma fuente explicó que estaba previsto que fueran subiendo a planta de manera progresiva a lo largo de la jornada de ayer.

Desde UGT insistieron en referir el plan previsto para afrontar el verano como el factor desencadenante de la situación vivida ayer.

En opinión de Santamaría no constataron ayer «gran afluencia a Urgencias, pero sí necesidad de camas», escenario que la formación sindical entiende que se deriva de que «hay 40 camas menos».

La crítica sindical no acabó en este punto. Tampoco el refuerzo de profesionales previsto les parece adecuado para afrontar la actividad asistencial durante el verano: «Se queda corto y el personal sufre sobrecarga de trabajo».

Durante la campaña de vacaciones del año pasado cuestionaron el personal que se había previsto mostrando el temor a que las Urgencias se vieran saturadas por el índice de sustituciones, así como por el cierre de los centros de salud por la tarde.

Los problemas derivados de la presión asistencial en este centro sanitario se producen tanto en invierno como en verano. El pasado febrero la situación llevó a que la dirección del hospital tuviera que habilitar áreas de preingreso en salas de estar de varias plantas, además de la ya mencionada en una área destinada inicialmente a sala de espera para familiares.

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