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Sábado, 19 de mayo 2018, 20:01
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Como quien clama en el desierto, las voces que avisaban de la inseguridad en la avenida del Cid no dejaban de crecer desde el desmontaje de las pasarelas peatonales, decisión tomada por el PSPV para cumplir su programa electoral y aplaudida por sus socios de gobierno de Compromís. Tampoco cesaban las declaraciones de distintos concejales socialistas que decían que la avenida es segura. La realidad, tozuda, ha dado la razón a los primeros. El Ayuntamiento de Valencia se ha visto en la obligación de colocar señales que alertan de la existencia de pasos de peatones a 100 metros en las subidas, tanto sentido entrada como sentido salida de la ciudad, del paso inferior de la avenida del Cid, permite salvar la intersección con Tres Cruces.
Era la crónica de una medida anunciada. Desde el desmantelamiento de las pasarelas peatonales, ha habido cerca de 90 accidentes en la avenida del Cid, de distinta gravedad. En ninguno ha habido que lamentar muertos. Muchos de ellos se producían entre los números 140 y 160 de la avenida sentido salida, esto es, donde termina el túnel. El último, ayer mismo. Cuatro vehículos se vieron implicados en un alcance múltiple cuando el primero de los coches frenó al encontrarse el semáforo, presumiblemente en ámbar, y los coches que venían detrás de él le impactaron. No hubo heridos, pero la avenida permaneció colapsada durante varias horas al mediodía.
Ante esta situación, la oposición municipal ha pedido bien el retorno de las pasarelas bien informes técnicos que demuestren cómo se puede mejorar la seguridad en la avenida. Sobre todo habida cuenta de los documentos internos de la Cuarta Unidad de Distrito que desveló la Asociación de Vecinos de Nou Moles y en los que los agentes de policía alertaban ya al Consistorio de los problemas de seguridad que podía haber en la avenida si se quitaban las pasarelas peatonales, que si bien complicaban el tránsito para personas con movilidad reducida o de avanzada edad, también permitían un tráfico fluido (ahora hay múltiples atascos todo el día, como denuncian los vecinos) y reducían a cero el riesgo de atropellos. Seguridad Ciudadana se comprometió a realizar un informe sobre la seguridad vial en la avenida a raíz de una petición de Ciudadanos, pero el documento aún no ha visto la luz.
La colocación de las nuevas señales de tráfico (con placas solares para que estén iluminadas a todas horas) recuerda otras actuaciones municipales, como la que en la avenida del Oeste realizó la concejalía de Movilidad Sostenible para mejorar las seguridad vial. En esta vía también hubo decenas de accidentes, uno de ellos un atropello mortal, que motivó que Movilidad no mejorar la señalización en la zona.
Los concejales de Ciudadanos Narciso Estellés y María Dolores Jiménez dijeron ayer que estas medidas «tenían que haberse hecho antes». «Primero desmontan y después de los accidentes solucionan y ponen medidas para prevenir y avisar de la cercanía de un punto 'negro'», dijo Jiménez, mientras Estellés indicó que ya advirtieron de que la avenida «es una trampa muy peligrosa para conductores y peatones»:
«Era un problema evitable, pero entre Vicent Sarrià (PSPV) y y Giuseppe Grezzi (Compromís) han conseguido que los accidentes aumente exponencialmente».
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