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Arturo Checa
Miércoles, 26 de octubre 2016, 12:36
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El juzgado de instrucción número 21 de Valencia ha ordenado investigar las posibles presiones sufridas por Salvador Puigdengolas, el exdirector del Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo que la pasada semana aseguró haber recibido indicaciones para culpar a FGV del accidente del metro.
La juez ha ordenado abrir una pieza de deducción de testimonio y certificar si se produjo un delito de obstrucción de la justicia por parte de los que llevaran a cabo las supuestas presiones sobre el técnico del Invassat. El experto llevó a cabo un informe pericial en el que negó que por parte de FGV hubiera alguna infracción en materia de seguridad laboral.
La investigación será llevada a cabo por otro juzgado, quien deberá citar a declarar al perito y ordenar la práctica de diligencias sobre los responsables de las posibles presiones. En su testifical la semana pasada para ratificar su informe, el exdirector del Invassat no precisó de dónde salieron las mismas. Simplemente puso las presiones sobre la mesa y dijo que fue cesado de su puesto del Instituto unos días después de presentar su informe.
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