Orriols alerta de la subida de conflictos por las ocupaciones ilegales de viviendas

valencia. Más presión a los bancos, sobre todo a los que no pagan los recibos de escaleras ni el Impuesto de Bienes Inmuebles. La asociación vecinal de Orriols reclamó ayer al Ayuntamiento que active todos los resortes posibles para frenar la escalada de ocupaciones ilegales de viviendas propiedad de entidades bancarias en el barrio.

«Queremos que cumplan con la legalidad», dijo la presidenta vecinal, Maika Barceiro, quien recordó la propuesta del gobierno municipal de hace unos meses, en el sentido de ofrecer a los bancos que cedan estas viviendas para alquiler social a precios económicos.

«De eso no sabemos nada», matizó la dirigente vecinal, quien subrayó que «en caso de que eso salga adelante, lo más importante sería que hubiera un control efectivo de las viviendas». Citó como ejemplo los enganches ilegales de la luz, algo muy frecuente en la actualidad.

Las ocupaciones ilegales están teniendo un efecto colateral igual de perjudicial. La conflictividad en el barrio ha aumentado por parte de estos grupos de personas, en muchos casos menores. «Hace poco salió el caso de un chico de 12 años que se dedicaba a robar motos», citó Barceiro como uno de estos ejemplos.

En la esquina de las calles San Juan Bosco y Santiago Rusinyol es frecuente que sucedan estos conflictos. Una de las vecinas afectadas habló de «ruidos, escándalos y todo lo que trae el botellón». La calle Padre Viñas es otra de las vías donde se concentran viviendas ocupadas ilegalmente.

«Que hagan expropiaciones o lo que se les ocurra, pero esto lo tienen que arreglar», comentó Barceiro. El Consistorio tiene en concurso la elaboración de un plan estratégico de la ciudad por unos 60.000 euros, además de otra iniciativa para adquirir viviendas para ampliar el parque municipal, con un presupuesto máximo de 1,25 millones de euros. Cada uno de los pisos debe costar con máximo 50.000 euros.

La última dotación prevista en el barrio es la construcción de un jardín junto a la ermita dedicada a San Jerónimo. En total, una inversión municipal de medio millón de euros, que estuvo precedida por varias jornadas de participación ciudadana para el diseño de la zona verde, incluyendo una recreación en el mismo solar.

La presidenta vecinal comentó que desconocen los plazos del proyecto. «Nos dijeron que iba a estar listo este año, aunque queremos preguntar qué pasa con ese proyecto», indicó sobre una iniciativa que todavía no aparece en la mesa de Contratación tras presentar la inversión el pasado mes de abril.

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