La Federación de Vecinos reclama la gestión pública de las naves del Parque Central

valencia. Las obras del Parque Central avanzan en agosto y ya se ha completado la construcción del edificio de mantenimiento y servicios del gran jardín, en la parte recayente al paso elevado de Giorgeta, junto a uno de los muelles de carga reconstruidos. La presidenta de la Federación de Vecinos, María José Broseta, comentó sobre el uso del resto de las naves que la premisa para el Ayuntamiento debe ser una gestión pública en todas.

«Es un parque para Ruzafa, pero también para Valencia», comentó la dirigente vecinal, residente en este barrio. Con esto se refería a las alternativas barajadas los últimos meses, acerca de la autogestión de alguno de los equipamientos por parte de plataformas vecinales.

«No es lo que queremos en la Federación», reiteró Broseta. Las obras del Parque Central se han centrado los últimos meses en la descontaminación de varias parcelas, con hidrocarburos que han obligado a su retirada y traslado a un vertedero.

En total, se han tratado 16.179 toneladas de tierra. Una vez solventado este problema, donde falta retirar estructuras y cimientos de hormigón aparecidos en estas obras, podrá proseguir el ajardinamiento.

En cuanto a las naves protegidas, la mayor será para un polideportivo, con una piscina de rehabilitación, canchas y salas de deportes. «En la reunión que tuvimos en el Ayuntamiento se habló incluso la posibilidad de añadir alguna pista deportiva en los alrededores», dijo la presidenta de la Federación.

Otra de las naves, más pequeña, será para la Universidad Popular, mientras que la tercera será adscrita a Cultura para que sirve como local de teatro, exposiciones y actividades donde dar salida a la bulliciosa vida cultural de Ruzafa.

La cuarta se destinará a un centro juvenil, aunque Broseta comentó que «después de nuestra petición también se incluirá un centro de día». En cuanto a los dos muelles de carga servirán para cafeterías, restaurantes y comercios, con lo que lo más probable es que salgan a concurso para que sean llevados por empresas privadas. Pero el resto, insistió Broseta, debe ser «gestión pública, con visión de equipamientos para toda la ciudad». Además del jardín, también se trabaja en la reurbanización de la calle Filipinas.