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Jóvenes de fiesta en el entorno del puerto.
La Policía Local cierra seis nuevos locales de ocio por acumulación de sanciones

La Policía Local cierra seis nuevos locales de ocio por acumulación de sanciones

Los pubes clausurados en el Ensanche, Ruzafa y Sagunto incumplían horarios, aforos, excedían los decibelios y dos no tenían licencia

LOLA SORIANO

Sábado, 30 de julio 2016, 22:02

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El Ayuntamiento de Valencia ha procedido estos días al cierre de seis nuevos locales de ocio repartidos por la ciudad. Esta actuación se enmarca dentro de la campaña de lucha contra las actividades de ocio irresponsables y los empresarios que no cumplen las ordenanzas municipales.

Si durante el primer fin de semana de julio se procedió a la clausura de dos locales, uno situado en el barrio de Ciudad Jardín y otro en la avenida de la Plata, ahora se suman seis nuevos casos. Tres de estos locales clausurados se encuentran en el barrio de Gran Vía; uno de ellos en Pla del Remei; un quinto en el corazón de Ruzafa y el sexto en el barrio de Sagunto, cerca de la calle Ruaya.

Tal como explicó ayer la concejal de Protección Ciudadana, Sandra Gómez, «esta campaña ha comenzado a principios de julio, pero durante estos próximos meses va a continuar porque hay que terminar con la sensación de impunidad. Había locales que tenían muchas denuncias acumuladas de años atrás y hasta ahora no se habían resuelto los expedientes».

La concejal explicó que se ha comenzado por los casos más graves, «puesto que había un local que se ha cerrado porque tenía 56 sanciones y nunca se había actuado».

En estas nuevas actuaciones «se había detectado a dos locales que estaban operando sin tener ningún tipo de licencia del Ayuntamiento de Valencia», añadió la concejal de Protección Ciudadana.

Pero además, estos incumplimientos no son los únicos, algunos de los pubes superaban lo aforos, es decir, admitían más público del que en realidad tenían reconocido por ley.

También era frecuente el incumplimiento de horarios y algunos, además, de forma reiterada, a pesar de contar con varias denuncias vecinales y policiales.

Otro de los puntos de la ordenanza municipal que infringían era el de contaminación acústica. En algunos de los locales de ocio clausurados «estaban incumpliendo los límites de los decibelios, y había incluso locales que tenían el dispositivo que marca el volumen pirateado», según detalla la concejal de Protección Ciudadana. Y también era habitual la retirada de terrazas más tarde del horario marcado.

Los cierres de locales efectuados son temporales. Los empresarios tienen un tiempo para que hagan alegaciones y subsanen los puntos que incumplían y si siguen sin solucionarlo, se abre proceso sancionador.

Si bien el Ayuntamiento está a la espera de que la Generalitat le transfiera la competencia de imponer sanciones, la mesa de trabajo que han iniciado las concejalías de Protección Ciudadana y la de Actividades y Espacio Público con el Consell ha permitido llevar a cabo estas últimas órdenes de cierre.

Según dijo desde el principio la concejal Sandra Gómez, «hemos lanzado una ofensiva contra el ocio nocturno ilegal. Se trata de acabar con la sensación de impunidad, pero también es importante para devolver el derecho al descanso de los vecinos y para evitar la competencia desleal con los propietarios de los locales que sí cumplen».

La cifra de agentes dedicados a esta función de vigilancia en las principales zonas de ocio oscila entre 75 a 90 efectivos. Entre las sanciones impuestas se contemplan opciones como la denegación de la declaración responsable de apertura y la prohibición de ejercer la actividad; la orden de clausura de locales o la de suspensión de licencia.

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