Borrar
Joan Ribó habla con Pere Fuset y Jordi Peris en el pleno de este mes. :: Damián torres
Ciudadanos presenta una moción para que el nombre oficial de la ciudad sea bilingüe

Ciudadanos presenta una moción para que el nombre oficial de la ciudad sea bilingüe

El PP impugnará el proceso seguido por el tripartito al no existir un informe técnico que avale suprimir el topónimo en castellano

I. DOMINGO

Viernes, 29 de julio 2016, 23:44

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Un día después de que el pleno del Ayuntamiento de Valencia aprobará, con los votos en contra del PP y de Ciudadanos y a favor del tripartito (Compromís, PSPV y València en Comú), continuar con los trámites para que el nombre oficial de la ciudad sea únicamente en valenciano, ya hay respuesta por parte de los grupos de la oposición municipal.

Así, Ciudadanos formalizó ayer la moción que llevará al próximo pleno, que se celebrará ya en septiembre, y en la que insta al Ayuntamiento a mantener la nomenclatura en castellano. En concreto, el portavoz de esta formación solicita «que se inicien los trámites pertinentes para incluir, junto con la toponimia oficial de la ciudad en lengua valenciana, la nomenclatura castellana de 'Valencia'».

En el documento, al que ha tenido acceso este periódico, se recuerda que municipios y provincias de comunidades con lengua propia mantienen su nombre en las dos lenguas oficiales de su territorio. Un punto en el que se hace mención a la Ley 25/1999 del 6 de julio del Gobierno por la que se declaraban «cooficiales las denominaciones Alacant, Castelló y València para las provincias que integran la Comunidad Valenciana», así como el Decreto 25/1990 del 31 de enero, del Consell, por el que se aprobaba «a la nueva denominación del municipio en bilingüe: Alacant en valenciano y Alicante en castellano».

Para Ciudadanos, la decisión del cambio de nomenclatura se ha instrumentalizado «para provocar división y enfrentamiento entre los valencianos», conforme a la política «que se ha mantenido en este Ayuntamiento desde hace más de un año». El texto, firmado por el portavoz municipal de la formación, Fernando Giner, reclama al tripartito que recupere el consenso necesario para modificar un asunto como la denominación oficial del cap i casal. «Impuesto de la forma que fue produce malestar», asegura Giner en el escrito que se abordará en el pleno de septiembre.

En este sentido, el concejal ya usó ese argumento en la intervención durante el pleno, donde acusó al alcalde, Joan Ribó, de utilizar «la apisonadora» y obviar los informes elaborados por instituciones como Lo Rat Penat o la Real Acadèmia de Cultura Valenciana (RACV) en las alegaciones presentadas al cambio del topónimo del cap i casal.

La moción de Ciudadanos también critica el proceso seguido por el tripartito al rechazar estas alegaciones y, por tanto, excluirlas del expediente que el Consistorio remitirá a la Generalitat para solicitar la aprobación del cambio a València.

Informe de la AVL

Eso sí, antes tendrá que pronunciarse la Acadèmia Valencia de la Llengua (AVL), que ya en 2009 estableció en el 'Corpus toponímic valencià' que la denominación oficial de la ciudad tenía que ser València, recordando que era uno de los municipios que aún mantenía su nombre en situación irregular.

La AVL elevará un informe al Consell, que es quien debe aprobar la modificación en un pleno. Uno de los últimos casos ha sido el de Alboraya, que dio luz verde el pasado abril a la denominación bilingüe Alboraya/Alboraia. En este caso, el proceso se inició en septiembre de 2015 y la AVL emitió su dictamen favorable en enero.

Un informe técnico es precisamente lo que echa en falta el grupo municipal del PP en el expediente de modificación, por lo que ayer anunció que impugnará el proceso administrativo seguido por el Consistorio al entender que no existe ningún informe de estas características sino un escrito del alcalde contestando las alegaciones.

En este sentido, desde el gobierno municipal se insiste en que sí que hay informe aunque éste únicamente se centra en las reclamaciones presentadas. En el pleno, por ejemplo, la concejal Consol Castillo recordó que en su día, al aprobarse el Reglamento de Uso y Normalización del Valenciano en 1996, ya se elaboró un estudio. No obstante, fuentes jurídicas consultadas por este periódico explicaron que «una normativa propia no sirve para justificar una decisión de tal calado».

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios