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REDACCIÓN
Miércoles, 29 de junio 2016, 23:43
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El Ayuntamiento de Alicante reconoció ayer que no terminará de abonar el primer pago de las ayudas de XarxaLlibres hasta poco antes de que se inicie el próximo curso. La edil de Educación, María José Espuch, ha asegurado que se pagará «a todas las familias», aunque ha reconocido que el proceso es más lento de lo previsto.
En el caso de Valencia, el Ayuntamiento todavía no ha terminado de pagar la primera tanda cuando ya se están devolviendo los libros y hay que empezar a abonar a las familias la segunda parte de la ayuda.
Mientras, en otros ayuntamientos será la Generalitat la que «irá al rescate de las personas» y asumirá el pago de XarxaLlibres. Es el caso de los ayuntamientos de Bigastro, Aigües, Finestrat, Castielfabib, Foios y Cullera, a los que se les ha denegado la ayuda.
En este sentido, el conseller de Educación, Vicent Marzà, explicó ayer en Les Corts que las familias no tendrán que volver a hacer cola en los ayuntamientos para recibir la ayuda.
Marzà recalcó que cuando se devuelven los libros, el propio centro educativo marca una pestaña que genera la factura para el pago de forma automatizada.
Según argumentó en la cámara el conseller, se han dado dos horas a los maestros para hacer la selección de los libros válidos que devuelvan los padres, aunque ha asegurado que él lo hacía en una hora y aseguró que el objetivo es que el banco de libros «ya funcione en el segundo año» de implantación, en una declaraciones que recoge Europa Press.
Ayudas
Además, quiso dejar claro que si en un aula de 25 alumnos sólo se puede contar con libros del banco para 20 niños, la «diferencia será aportada por la Generalitat vía transferencia al centro» educativo del que se trate.
Mientras, el conseller de Hacienda, Vicente Soler, señaló también ayer en sede parlamentaria que las ayudas recibidas por las familias provenientes del programa XarxaLlibres estarán exentas de tributación del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Soler aseguró que las becas públicas para ayuda de libros de texto y material escolar están amparadas en la exención que contempla la letra J del artículo 7 de la Ley de Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas.
A una pregunta del diputado de Ciudadanos (C's) David de Miguel sobre si esas ayudas tendrán repercusión tributaria, Vicent Soler explicó que el pasado enero se hizo la pertinente consulta al Ministerio de Hacienda cuya respuesta, que llegó en marzo, remitía al citado artículo.
En concreto, ese articulado establece que están exentos las becas públicas, las becas concedidas por entidad sin fin lucrativos y las concedidas por fundaciones bancarias y cajas de ahorro en el desarrollo de su obra social para cursar estudios reglados tanto en España como en el extranjero.
Por ello, «en el sentido que expresó» la Administración tributaria estatal, el conseller de Hacienda concluyó que «las ayudas del programa XarxaLlibres están exentas de tributación del IRPF».
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