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El cardenal reivindica el peso de la Iglesia en la historia de Valencia

El cardenal reivindica el peso de la Iglesia en la historia de Valencia

La catedral se vio abarrotada de público que ondeó Senyeras en el Te Deum presidido por la bandera de Lo Rat Penat

Laura Garcés

Sábado, 10 de octubre 2015, 11:39

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La invitación del arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares, a participar en el Te Deum presidido por la Senyera de lo Rat Penat recibió una multitudinaria respuesta del pueblo valenciano que ondeó senyeras en el interior de la Seo. La catedral se llenó a rebosar de público, que también en gran número asistió a la misa previa en la que el arzobispo reivindicó el peso de la fe cristiana y de la Iglesia en la historia, la cultura y la sociedad valencianas. Las celebraciones de ayer, como recordó el prelado, responden a la acción de gracias para conmemorar la consagración de la Seo por orden del rey Jaume I en 1238.

El Te Deum este año fue diferente a las 24 ediciones anteriores. El acto llegó acompañado de la gran expectación generada por la decisión del Ayuntamiento de suspender la entrada de la Reial Senyera en la catedral. De hecho, la enseña que ayer protagonizó la celebración no era la histórica, sino la de Lo Rat Penat, institución cultural que al conocer el acuerdo del gobierno municipal ofreció su bandera. El cardenal Cañizares aceptó ese ofrecimiento y, además, anunció que habría Te Deum.

La raíz cristiana

A las 10 de la mañana comenzó la misa en cuya homilía, aplaudida por el público, el cardenal recordó la influencia del cristianismo en la vida social y cultural del pueblo valenciano al recalcar que «Valencia no puede ignorar cómo se ha transformado ella a raíz precisamente de aceptar a Jesucristo y así aparece en sus obras de caridad y de cultura, que nacidas de la fe cristiana y de la Iglesia han servido tanto y tan bien al pueblo valenciano que hoy miramos con sano orgullo».

Refirió las obras artísticas creadas a la sombra de la fe cristiana que «admiramos y enaltecen nuestro pueblo» y citó a los hombres y mujeres que impulsados por su fe han hecho posible «ese pueblo resplandeciente de humanidad que nos encontramos hoy en el pueblo de Valencia».

Fueron varias las referencias que hizo a la historia y a las raíces cristianas en un día que definió de «esperanza» porque se celebra «el gozo de haber sido restablecida de nuevo la fe cristiana en Valencia».

Pero no sólo habló de pasado. También el futuro ocupó la alocución del prelado, quien tras defender las aportaciones de la Iglesia a lo largo del tiempo aseguró que seguirá «prestando grandes servicios a la sociedad y a Valencia y no cejará en su empeño de apostar por el hombre».

La apuesta, como avanzó Cañizares, se materializará «a través de sus miembros e instituciones en las labores educativas y asistenciales que se han visto fuertemente acentuadas por el crecimiento de los sectores de marginación».

El arzobispo cerró la misa con el mensaje de que «Valencia se reconstruyó como patria sobre los cimientos de la fe cristiana» y el agradecimiento a los asistentes que llenaban «completamente la catedral». Todos los bancos de la Seo estuvieron ocupados durante la misa, pero a medida que se acercaba la hora del Te Deum la presencia de valencianos se incrementó hasta abarrotar el templo.

El cardenal, acompañado del obispo auxiliar y el valenciano prelado emérito de Lleida, Joan Piris, tras besar la bandera recorrió el pasillo central hasta llegar a la puerta de la Seo -entrada barroca-, donde recibió a la Senyera de Lo Rat Penat que, acompañada de numerosos ciudadanos, llegó al templo portada por Luis Abad, socio de la institución y abanderado habitual de la misma.

La enseña entró en la catedral vitoreada y aplaudida por el público que mantuvo su ovación durante el recorrido de la bandera por el pasillo central hasta llegar a los pies del presbiterio. «Vixca València», «Vixca la Reial Senyera» y «Vixca la Mare de Déu» fueron algunos de los vítores que se escucharon al paso de la bandera por el interior de la Seo. Ante el altar se detuvo la bandera flanqueada por el presidente de lo Rat Penat, Enrique Esteve, y por Fernando Giner Giner, miembro de la junta de gobierno.

En ese momento ya se habían incorporado a la celebración los representantes políticos que se sumaron al Te Deum. Entre los asistentes se encontraban los concejales del Partido Popular encabezados por su portavoz, Alfonso Novo. También acudieron los ediles de Ciudadanos con Fernando Giner al frente, quien señaló que asistieron a título personal, pero por decisión cojunta del grupo. También se vieron caras conocidas de diputados provinciales y de parlamentarios autonómicosl.

Presencia de políticos

Entre los representantes políticos que se sumaron a la celebración se encontraba la exalcaldesa y senadora Rita Barberá, que explicó a los medios de comunicación que se encontraba en el acto porque es «valenciana y senadora».

Isabel Bonig, presidenta del PP en la Comunitat y diputada en Les Corts, llegó en los últimos momentos al Te Deum, tras asistir al acto institucional en el Palau de la Generalitat, y destacó que el acto religioso forma parte de la «esencia del pueblo valenciano» con «independencia de las creencias» de cada uno. Subrayó que «la historia hay que respetarla, no reinterpretarla».

También acudieron los diputados del grupo parlamentario popular en les Corts, Maria José Catalá, Jorge Bellver y Vicente Betoret; el vicepresidente de les Corts, Alejandro Font de Mora, el senador Pedro Agramunt, así como el delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Moragues, y la secretaria de Estado del Ministerio de Sanidad Susana Camarero.

El delegado del gobierno lamentó que la Reial Senyera no entrara en el templo y consideró que el cambio de gobierno haya producido «una ruptura de las tradiciones». Criticó que con esta decisión se ha generado «más tensión» y emplazó a los políticos a apostar por la «unión y la concordia».

A juicio del delegado del Gobierno romper con la tradición «divide» y genera debates en la sociedad que antes «no estaban». Tras estas consideraciones reivindicó la Senyera y el respeto a los símbolos y las tradiciones de los valencianos.

El Te Deum lo interpretaron una treintena de cantores de la Coral Catedralicia dirigidos por José Climent, prefecto de Música Sacra y fueron ovacionados por el público. Al finalizar los actos en la catedral, el cardenal arzobispo de Valencia se trasladó hasta la plaza del Ayuntamiento para incorporarse a la celebración cívica. El cardenal, junto al obispo, Esteban Escudero, y el vicario episcopal, Vicente Fontestad, presenció la bajada de la Reial Senyera desde la plaza.

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