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La señal de la limitación de velocidad ubicada en la plaza del Ayuntamiento, ayer. :: irene marsilla
Confusión y falta de señalización en  el primer día a 30 kilómetros por hora

Confusión y falta de señalización en el primer día a 30 kilómetros por hora

El Ayuntamiento resalta la normalidad en el centro en el primer día de vigencia y reconoce que será necesario un periodo de adaptación

ISABEL DOMINGO / DANIEL NAVARRO

Miércoles, 2 de septiembre 2015, 00:04

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Oviedo, Bilbao, Málaga (donde este verano el Ayuntamiento ha invertido más de 125.000 euros en habilitar cuatro nuevas zonas) y, desde ayer, Valencia. El cap i casal se ha sumado a la lista de ciudades donde la velocidad de los vehículos no puede superar los 30 kilómetros por hora en el centro.

Las plazas del Ayuntamiento y la Reina y calles como San Vicente, Barcas, Pintor Sorolla, Marqués de Sotelo, Barón de Cárcer o Roger de Lauria han pasado a incrementar el listado de calzadas con limitación de velocidad con el objetivo de evitar que los conductores usen el centro como zona de paso para ir a otros barrios, según explicó este lunes, el alcalde, Joan Ribó, y el concejal de Movilidad, Giuseppe Grezzi, al presentar la iniciativa.

Sin embargo, la medida arrancó entre la confusión y el desconocimiento de los conductores y la falta de señalización en las calles. Ocurrió, por ejemplo, en la plaza del Ayuntamiento, donde la única placa visible está situada en el acceso por la calle San Vicente. En el caso de la entrada por Periodista Azzati, la única referencia para el conductor es la señal instalada previamente en la plaza San Agustín, en la isleta de los autobuses de la EMT.

Respecto a las señales viales, todavía no se han pintado ya que la intensa lluvia caída el lunes en la ciudad impidió que los operarios pudiesen realizar el trabajo. Fuentes municipales explicaron que esta actuación se retomará cuando la calzada esté seca. De ahí que muchos conductores circularan a la velocidad habitual, los 50 km/h, especialmente en vías amplias, como Barcas y Barón de Cárcer.

Ayuntamiento

«Total normalidad aunque hay gente confundida»

No ocurrió lo mismo con los trabajadores de la EMT, que respetaron la nueva normativa y hasta el concejal Grezzi quiso agradecerles el «total respaldo» a la medida. Ya durante la presentación de la campaña, el edil destacó la importancia que tendrá el transporte urbano y su mejora en el éxito de la «pacificación del tránsito en el centro ».

El responsable de movilidad del tripartito resaltó la «total normalidad» durante la jornada, según los datos del Centro de Gestión de Tráfico. Eso sí, reconoció que puede haber «gente confundida» porque el anterior gobierno no había diseñado las zonas 30 de forma correcta. Así, Grezzi avanzó que se trabaja en el rediseño de estas vías, donde los peatones tienen preferencia de paso.

El edil resaltó la «plena confianza» del equipo de gobierno en los valencianos y su adaptación a la medida aunque reconoció que será necesario un periodo de asimilación de los 30 km/h en toda la ronda interior hacia dentro (ya que se excluyen calles del anillo como Colón, Xàtiva o Blanquerías).

Comerciantes y Mercado Central

«Es adecuado pero de muy difícil cumplimiento»

Para los vendedores del Mercado Central la restricción de velocidad en Ciutat Vella es una medida «positiva porque pacifica el tránsito pero no nueva, porque existía ya la zona 30 aunque no era muy conocida». Según el presidente de la asociación, Francisco Dasí, «es adecuado pero de difícil cumplimento porque la anchura de algunas vías no es proporcional a la velocidad».

En el caso de la Asociación de Comerciantes del Centro y del Ensanche, la preocupación es que la medida no perjudique a los vehículos de mercancías y a los clientes que quieran acudir con sus vehículos a realizar las compras.

Conductores

«Nadie subirá a los taxis, pensarán que es una estafa»

Los que tienen coche son los que están más divididos. Lidia, que usa su automóvil a diario, comentó que reducir a 30 kilómetros el límite de velocidad es aceptable en algunos puntos del centro, como las grandes plazas, pero que esto no debe ampliarse a las grandes vías donde debe poder circularse a mayor velocidad». Por su parte, Raúl rechazó la normativa. «Ir a 30 por hora va a acumular el tráfico y va a ser una lata». Además, explicó que «es imposible conducir así, enseguida se acelera».

Por su parte, los taxistas rechazaron de frente el anuncio y aseguraron que supone un duro golpe para su oficio. En esta línea, Antonia explicó que «el que se sube a un taxi tiene prisa y quiere llegar pronto para que el viaje le salga lo más barato posible». Apuntó que los usuarios pensarán que es «una estafa al ver que el taxi va más lento que los peatones y las bicicletas». También Enrique estuvo de acuerdo: «La medida va a generar muchos atascos y va a hacer imposible circular por el centro de Valencia», lamentó.

Peatones y ciclistas

«Valencia necesita una cultural peatonal»

José Luis, un jubilado que siempre se desplaza caminando, explicó que «en la ciudad se necesita una cultura peatonal y que el tráfico en el centro debería restringirse tan sólo al transporte público y a las bicicletas». En la misma línea se posicionó Alicia, la cual hace uso de las bicicletas habitualmente. «A veces da auténtico miedo ir en bici por el centro, porque algunos circulan como locos», comentó la joven y añadió que la medida es beneficiosa para el colectivo. También estuvo a favor Diego, un turista que está visitando la ciudad. «La limitación me parece una gran idea, ya que esta es una zona muy transitada», dijo. Añadió que en Lousana, la ciudad en la que vive, existe una regulación similar en el casco histórico para prevenir los accidentes.

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