La plaza del Temple y las torres de Quart serán peatonales tras las obras del carril bici

Las obras de construcción del carril bici de la ronda interior será uno de los primeros proyectos con el que tendrá que lidiar el equipo de gobierno que se ponga al frente del Ayuntamiento de Valencia. De momento, desde el grupo Compromís, que accederá al gobierno local si finalmente llegan a buen puerto los acuerdos de izquierdas, aseguran que una de las primeras mejoras que harán a este proyecto es incluir la peatonalización de las distintas entradas al anillo interior de la ciudad.

El objetivo es ganar espacio para los viandantes en puntos de la ronda interior con edificios emblemáticos como la plaza del Temple, donde se encuentra la sede de delegación del Gobierno ahora en obras; el entorno de las torres se Quart y, en la medida de lo posible, ampliar parte de las aceras de las torres de Serranos, en la parte frontal.

«No sólo apostamos por mejorar el proyecto del carril bici que está en tramitación en el Ayuntamiento, sino que pensamos que es necesario acompañar esta iniciativa con la mejora de los edificios destacados que lo rodean. Queremos dignificar las entradas a la ciudad», según Joan Ribó, dirigente de Compromís que se postula como alcalde.

Uno de los cambios que plantean como más destacados es la eliminación de la zona de aparcamiento de vehículos de la plaza del Temple. «Es uno de los puntos de acceso a la ciudad y no tiene sentido que un edificio con esa arquitectura se le reste importancia con el aparcamiento», indica Joan Ribó. Todo el triángulo del Temple sería peatonal, para un mayor disfrute de viandantes.

En las torres de Quart, como está previsto el traslado de la gasolinera, «el objetivo es que desaparezca el vial de servicio que, en realidad sirve para aparcamiento, salvo para los vecinos que accedan a los garajes. Se mantendría el giro de coches hacia Quart-Extramurs, pero no el tramo de aparcamiento, donde se crearía un jardín», explican.

Dignificar los monumentos

Otro edificio histórico donde pretenden ganar espacio para los viandantes, aunque no peatonalizar plenamente porque es una zona de mucho tráfico, es el entorno de las torres de Serranos. La idea es ampliar todo lo técnicamente posible la acera que bordea las torres de Serranos, junto a Blanquerías.

En este punto, el carril bici de la ronda interior no restará espacio a los coches, ya que Compromís opta por dirigir las bicicletas por los jardines de las Alameditas. Además, en la revisión del proyecto quieren que en el área de paso de peatones para acceder al río, las aceras y la calzada estén al mismo nivel para «facilitar el trayecto a los viandantes y que la pequeña elevación que se produzca, sirva como elemento disuasorio para que los conductores moderen la velocidad», indican.

A la altura de de la calle Xàtiva, por donde también pasará el carril bici, Compromís cree que es preciso sacrificar alguno de los ocho carriles destinados para coches para ampliar las aceras. Y en Guillem de Castro, ven necesario ampliar las aceras a la altura de la Beneficencia.

Posponen la plataforma

En cuanto al diseño del carril bici en Guillem de Castro, junto al MuVIM, explican que ahora descartan el planteamiento que tenían de construir una plataforma en altura anulando uno de los dos carriles del túnel, y que dejarán el carril bici por la parte izquierda. «Será uno de los únicos puntos donde no mantendremos los mínimos de dos carriles para coches y uno para autobuses. Estaría el de la bici y dos de coches, pero uno sería compartido con el bus».

Ribó explica que aparcan la plataforma para no encarecer el proyecto y a la espera de ver cómo funciona con el carril bici en la izquierda y, en caso de producirse cuellos de botella, rescatarán la medida.

Una cuestión que tienen clara es que el carril bici tiene que ampliarse a los 3 metros. «Uno de los modelos de carril bici bien hecho es el de la avenida Baleares, donde se empleó un carril entero de coches y tiene recorrido de ida y vuelta», indicó Ribó. Desde Compromís explican que en el diseño que se está tramitando en la actualidad, «hay puntos, como en un tramo de plaza Tetuán donde el carril es de 1,90 metros o en Pintor López, de 1,72 metros y es insuficiente porque no sería seguro. No es un proyecto que se deba hacer con prisa o crearlo sólo con lo que les sobre a los coches», añade.