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Figuración de la plaza entre Cirilo Amorós y Pizarro. :: lp
Vecinos y arquitectos plantean más arbolado y zonas peatonales en las obras del centro de Valencia

Vecinos y arquitectos plantean más arbolado y zonas peatonales en las obras del centro de Valencia

El proyecto municipal aprobado incluye sólo cinco árboles en Hernán Cortés y seis en Pizarro, una cifra insuficiente para los residentes del centro

PACO MORENO

Martes, 17 de febrero 2015, 00:04

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Un Ensanche más verde, más peatonal y con el mismo coste que los proyectos decididos por el Ayuntamiento para las transversales que van desde la Gran Vía Marqués del Turia hasta la calle Colón. Esa es la alternativa presentada por un grupo de arquitectos de esta parte de la ciudad, que han empezado a hacer circular por el barrio con buena aceptación aunque con el lógico escepticismo de convencer al gobierno municipal de que reflexione sobre el diseño elegido.

José Luis Gisbert y Pilar Ferreres son dos de los arquitectos redactores de la alternativa, donde han tenido la colaboración de Álvaro Hueso y Javier Pepiol. El primero dijo que «la idea es generar debate y que sirva para mejorar». La propuesta se centra en las calles Hernán Cortés y Pizarro, aunque podría extenderse perfectamente al resto de calles del Ensanche, dado que la trama urbana es casi idéntica.

La propuesta ya está en manos de la concejalía de Urbanismo, aunque no ha dado una contestación oficial a los promotores de la iniciativa. La junta de gobierno aprobó recientemente la primera remodelación en uno de los cruces de Cirilo Amorós, con los clásicos orejones idénticos a los realizados en Ruzafa.

La ampliación de las aceras elimina las plazas de aparcamiento, además de generar nuevos espacios peatonales. La alternativa de este grupo de arquitectos es diseñar auténticas plazas gracias a un cambio sustancial en la planta viaria.

En lugar del clásico cruce en la calzada, la opción que proponen es una plaza central como «lugar de encuentro para los vecinos» , con una calzada que la rodea por tres de sus lados. La excepción a esto serían los lugares por donde pasen los autobuses de la EMT. El estudio es de lo más completo e incluye hasta los tiempos de ahorro para los peatones, al poder andar el línea recta sin bordear la calzada. El recorrido por los cruces es un 25% más rápido.

Otro de los puntos fuertes del estudio se refiere al arbolado. Los redactores del estudio son firmes defensores de las zonas verdes como beneficiosas para la ciudad, por lo que rechazan la alternativa municipal. Según la documentación a la que han tenido acceso en el Consistorio, en la calle Hernán Cortés se plantarán cinco árboles, mientras que en Pizarro serán seis.

«Sale un árbol cada 30 metros», indicó Gisbert, mientras que en la alternativa hay una profusión de árboles. Esto se logra tanto en los cruces como en las propias calles. En un estudio comparativo, el resto del Ensanche sí que tiene arbolado salvo las transversales que ahora quiere reformar el Ayuntamiento. La diferencia es que el ancho pasa de 16 a 12 metros, aunque esto no debe ser obstáculo para decidir una mayor mancha verde.

Una de las claves se encuentra en la ampliación de las aceras hasta eliminar el carril del aparcamiento. En su lugar se harían numerosas plazas de carga y descarga también para usos de los vecinos, así como pasos de peatones suficientes para convertir las calles en semipeatonales.

Otra de las ventajas del arbolado es el atemperamiento del calor. La diferencia entre una calle con sombras y otra soleada durante todo el día ronda los seis grados centígrados, según el documento. Además, se da la circunstancia de que los árboles en el proyecto de Hernán Cortés están situados en la parte menos soleada.

Y en el aspecto económico, Gisbert destacó que las plazas en los cruces apenas suponen 10 metros cuadrados más de pavimentación, por lo que «los beneficios a medio y largo plazo son muy superiores. Además, el retorno de la inversión en el contexto de crisis actual es garantía de buena administración del dinero público».

La concejalía de Urbanismo ha comenzado la reurbanización de la calle Félix Pizcueta, aunque todavía no ha sacado a concurso el resto, por lo que los impulsores del documento entienden que hay tiempo más que suficiente para «reflexionar y debatir sobre estas calles».

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