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Un tramo del jardín del Turia.
Valencia es la gran ciudad que menos gasta en limpieza y jardines

Valencia es la gran ciudad que menos gasta en limpieza y jardines

El ayuntamiento supera a la mayoría de capitales de provincia en el pago de deuda a los bancos y se desploma en lo que destina a atención social

Paco Moreno

Sábado, 20 de diciembre 2014, 21:00

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A cojón visto, macho seguro que dicen los castizos, aunque esto sirve también para evaluar la gestión de los ayuntamientos cuando ya se han gastado el dinero. Es lo que ha entendido el Ministerio de Hacienda al difundir la ejecución del Presupuesto de 2013 de un total de 10.368 entidades locales, separando el gasto de las principales partidas para su análisis.

La orden partió en noviembre, indicaron fuentes del ministerio, por lo que este año no ha sido posible detallar todos los gastos, lo que se hará el próximo ejercicio con el Presupuesto de 2014. Aún así, se perfila con claridad la estrategia de Valencia y su comparación con el resto de grandes ciudades.

Mucho dinero para pagar la deuda pública, por debajo de los demás en los servicios básicos y lo mismo sucede para la protección social con el dinero que se destina a promoción de empleo y ayuda al comercio, entre otros.

Es el contrapunto de las cuentas del próximo año, expansivas por primera vez desde el inicio de la crisis económica y donde se han disparado las inversiones para los barrios. Eso sí, sin poder recurrir a préstamos bancarios para cumplir de esta manera lo estipulado por el Gobierno de Rajoy.

Los servicios públicos básicos son aquellos indispensables para que funcione un municipio. Limpieza, recogida de basura, saneamiento de aguas residuales y conservación de los jardines, entre otros. En este apartado, el cap i casal destinó en el ejercicio de 2013 unas partidas que suman 301.328.727 euros.

Eso supone un desembolso de 378,1 euros por cada habitante empadronado en Valencia, una cifra muy por delante de otras poblaciones del entorno. La condición de la capitalidad se nota y el gasto medio en estas contratas es mucho más elevado que por ejemplo la cercana Mislata, que apenas llega a 220,8 euros según el mismo estudio.

En el resto de la provincia se percibe algo parecido, dado que Gandia alcanza los 377,1 euros, Sagunto los 340,3 euros y Alzira los 333,2 euros. La capitalidad de las comarcas hace que los ayuntamientos deban destinar más parte de su presupuesto a estas cuestiones.

La comparación cambia por completo cuando se echa la vista un poco más allá, hacia el resto de capitales de provincia, en especial de más de medio millón de habitantes. Valencia se coloca entonces en el furgón de cola muy por detrás de otros municipios.

El ranking está encabezado por San Sebastián, con un gasto medio por habitante en servicios básicos de 691,5 euros. Barcelona se sitúa en segunda posición con 670,3 euros y Madrid cierra el podio con 587,7 euros por vecino empadronado.

Inversión por habitante

  • gasto en servicios públicos

  • Valencia

  • 378, 1 euros por habitante

  • Alicante

  • 344, 7

  • Castellón

  • 388, 4

  • Barcelona

  • 670,3

  • Madrid

  • 587 ,7

  • San Sebastián

  • 691, 5

  • Málaga

  • 508, 2

Si la comparación se produce con municipios de población similar, entonces también sale perdiendo Valencia. Málaga, con 567.433 habitantes, destina 508,2 euros per cápita a los servicios básicos, mientras que Sevilla (702.355) se queda en 392,5 euros. El padrón del cap i casal en dicho ejercicio se cerró con 797.028 vecinos.

El cambio de inflexión citado en el Presupuesto municipal de 2015 se centrará en una mayor partida para la limpieza de las calles, donde junto a la recogida de la basura se alcanzarán los 56,5 millones de euros. Queda claro en las fichas de gasto ahora en fase de alegaciones que el incremento respecto a este año será sólo para el barrido.

Lo mismo sucederá con el mantenimiento de los jardines, donde el gasto se irá hasta los 24 millones de euros. De esta manera se pretende responder a las quejas vecinales sobre estos dos aspectos de la gestión municipal. En todas las comisiones de quejas y sugerencias, dos de las constantes de las estadísticas son el predominio de las protestas por la suciedad en las calles y las deficiencias en las zonas verdes.

Sin fecha para la reunión

¿Qué pasará con el presupuesto definitivo? El pleno debe celebrarse el próximo día 26 y todos los grupos municipales ya han tramitado las reclamaciones, aunque la tónica normal es que no se incluya ninguna. Más dudoso es lo que ocurra con el listado presentado por la Federación de Vecinos, donde cerca de medio centenar de barrios tramitaron propuestas para intervenciones concretas, tanto para nuevos equipamientos públicos como mejoras en los servicios básicos, donde ahora Valencia está a la cola de las grandes ciudades españolas.

La presidenta vecinal, María José Broseta, comentó ayer que no tienen todavía fecha para la reunión pendiente con el vicealcalde, Alfonso Grau, y el concejal de Hacienda, Silvestre Senent, acerca de las peticiones de las entidades que se pueden incorporar al documento definitivo. Recordó que el pasado año rechazaron elegir el destino de un millón de euros en el Presupuesto para intervenciones en los barrios, al entender que debían reservarse para ayudas sociales. «Todos lo estamos pasando mal y no hay que recortar ahí», subrayó.

La dirigente vecinal entendió que parte de la respuesta a las reivindicaciones vecinales ha sido el incremento en las partidas de limpieza y mantenimiento de jardines, lo que puede elevar la posición de Valencia en el ranking nacional el próximo año. Sobre esto, fuentes del Ministerio de Hacienda precisaron que el listado será exhaustivo para cumplir así con la Ley de Racionalización. Además, está en clara sintonía con el Plan de Transparencia puesto en práctica por el Gobierno la pasada semana y donde se han dado a conocer los sueldos de los altos cargos de la Administración y los contratos firmados estos años.

Broseta indicó que «aunque se hayan aumentado esas partidas queremos que haya más atención a los barrios, como algún centro social que se ha pedido. Citó las partidas destinadas a la creación de empleo y fomento del transporte público como otras destacadas.

En cuanto a la comparación en servicios básicos, Castellón está en el puesto 22 de capitales de provincia (Valencia está uno por detrás), con un gasto medio de 388,4 euros. En cuanto a Alicante, se hunde en la tabla todavía más que el cap i casal, al quedarse en el puesto 33 con un desembolso del Presupuestos para estas partidas de 344,7 euros. Por último, otra ciudad similar a la capital valenciana también en dificultades para cubrir estos servicios es Zaragoza, el farolillo rojo del listado con sólo un presupuesto de 159,1 euros por vecinos en 2013.

También a cola en las ayudas

  • comercios

  • El apoyo al comercio, los empresarios y las políticas de innovación tecnológica aparecen también en el trabajo realizado por el Ministerio de Hacienda. En este caso, la situación de Valencia vuelve a estar por debajo del resto de grandes ciudades en cuanto a la media de gasto por habitante. Así, el cap i casal destinó 65,3 euros por vecino, mientras que en Barcelona se elevó hasta los 70,7 euros y en Madrid a los 71,8 euros. Todos los datos proceden de los propios consistorios, al igual que ocurre con Sevilla, que se disparó hasta los 124,5 euros y Zaragoza, con 111,5 euros. Málaga tiene una cifra similar a la de Valencia conun desembolso de 67 euros.

Eso es lo que ocurre con lo que podría denominarse artículos de primera necesidad de las ciudades, aunque la situación es bien distinta cuando se compara la misma información difundida por el Gobierno respecto al pago de la deuda.

En este caso, el consistorio ha cumplido con creces los deberes gracias al pago de 112.752.221 euros, lo que ha recortó el abultado endeudamiento del consistorio. La media resulta de 141,5 euros por vecinos y es la más elevada de la provincia, por delante de Xirivella (102,3 euros) y Gandia (101,8 euros). El único municipio que ha hecho un desembolso mayor ha sido Alaquàs, con el pago de 146,4 euros por cada habitante empadronado.

La comparación es similar cuando se amplía el arco a las capitales de provincia españolas, sobre todo las grandes ciudades. Mientras que el cap i casal se quedó en el pasado ejercicio en 141,5 euros, la decisión del consistorio de Sevilla fue de destinar sólo 70,1 euros por habitante, mientras que en Málaga fueron 101,4 euros y en Barcelona 86,2 euros.

La anormalidad de Madrid

En el apartado de los servicios básicos, Zaragoza había dedicado un gasto inferior a Valencia, aunque ocurre lo mismo en el caso de la amortización de deuda y el pago de intereses, dado que fue de una media de 103 euros por vecino. Sólo el caso de Madrid es anormal, dado el agobio que soporta por una deuda extraordinaria con la que financió varias infraestructuras en los pasados años. Así, fue de 411,7 euros por cada habitante.

De cara al próximo año, la amortización de los préstamos se elevará hasta los 69,6 millones de euros, lo que dejará el contador del consistorio en 728 millones a 31 de diciembre de 2015. Esto supone un índice del 98,04%, similar al que había antes de la crisis económica.

Al margen de posibles modificaciones, el pago es sensiblemente inferior a lo que ocurrió en 2013 y permiten al gobierno municipal dedicar más partidas a los barrios. En los años de bonanza, la estrategia del consistorio se basaba en gran medida en el endeudamiento. La alcaldesa Rita Barberá defendió durante la presentación de los Presupuestos del próximo año que así se han puesto en servicio un millar de equipamientos en toda la ciudad.

Además, el viento sopla de cara también en lo que respecta al pago de la deuda por la bajada de intereses. El concejal de Hacienda, Silvestre Senent, firmó este miércoles cuatro de las seis nuevas operaciones de préstamos destinados a cancelar otros anteriores, a un tipo más elevado. Las nuevas operaciones suponen un importe total de 171,7 millones de euros y supondrán un ahorro en los pagos de 18,3 millones. Parte de esta cantidad, en concreto 4,5 millones, se destinará a inversiones el próximo ejercicio.

La fidelidad al pago de los préstamos bancarios ha sido comparada en ocasiones por los grupos de la oposición con lo que ocurre en la morosidad con los proveedores y las contratas. La concejala de Esquerra Unida Rosa Albert ha denunciado, con la ejecución del Presupuesto de este año en la mano, que los pagos a los bancos están al día prácticamente en un 100%, mientras que el resto tiene una demora en el 25% de las obligaciones aprobadas.

A fecha de 30 de noviembre, el consistorio había abonado un total de 104,3 millones de los 106 millones presupuestados para este año. Por el contrario, de los 161,2 millones para contratas y proveedores ya reconocidos sólo se había ordenado el pago de 150,2 millones.

El trabajo del Ministerio de Economía habla también del dinero que se destina a la promoción de empleo, bienestar social y la atención a los mayores, entre otros apartados sumados en el paraguas de Actuaciones de Protección y Promoción Social. En este caso, muchas de las poblaciones de la provincia de Valencia sobrepasan el esfuerzo del cap i casal, que se queda en una media por habitante de 77,5 euros, mientras que en Gandia se llega a los 162,3 euros y en Alzira a los 116,7 euros.

En cifras totales, el desembolso en 2013 fue de 61.774.077 euros, prácticamente la mitad de lo destinado al pago de la deuda, lo que supone un argumento más para las críticas de la oposición pese al descenso acusado en el endeudamiento los últimos años.

En el listado del Ministerio hay un cuarto apartado que se refiere a lo que denomina producción de bienes públicos con carácter preferente, es decir, lo que destinan los ayuntamientos a la sanidad, educación, deporte y ocio. En el caso de Valencia fueron 100,6 millones de euros, es decir, una media de 126,3 euros por cada habitante.

Se trata de servicios añadidos pero considerados vitales cada vez más en los municipios. En el resto de España, Barcelona alcanzó los 164 euros por vecino y Madrid los 128 euros, superando en ambos casos al cap i casal. De similar población, el ayuntamiento de Sevilla destinó menos dinero para estos gastos, un total de 104 euros por habitante.

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