Nintendo corrige la 3DS

Resulta curioso que uno de los primeros mensajes con los que Nintendo aborda la presentación de su nueva gama de portátiles sea el de que no van a dejar en la estacada a los usuarios de la 3DS original. "Habrá juegos exclusivos para la New Nintendo 3DS, pero calculamos que andarán en torno al 10%, como sucedió con la Game Boy Color, y serán fácilmente diferenciables por el diseño de la caja", explica Manuel Curdi, product manager de consolas portátiles de Nintendo España. Y tiene sentido que sean claros al respecto. Al fin y al cabo, la pequeña de Nintendo ha vendido ya más de 50 millones de unidades en todo el mundo.

En realidad, la nueva portátil es la máquina que debería haber sido cuando la primera consola salió a la venta, en marzo de 2011. La revisión está llamada a sustituir a la 3DS y a la 3DS XL originales, puesto que llega en idénticos formatos. Los parecidos son evidentes, si bien el salto entre la 3DS y la New 3DS es algo más dramático dado que en una carcasa de similares dimensiones han logrado introducir dos pantallas un poco más grandes -la superior pasa de las 3,53 pulgadas a las 3,88, mientras que la inferior se queda en las 3,33 pulgadas frente a las 3,02 de la original-.

Aparentemente, el diseño es muy similar al anterior, pero pronto destaca lo que en Nintendo llaman palanca C, un pequeño botón de goma que hace las veces de segundo stick, utilizado habitualmente para mover la cámara. No es la solución más cómoda del mundo ya que apenas tiene recorrido y tampoco es muy ergonómico -recuerda a aquellos pequeños sticks que hacían las funciones de ratón en los ordenadores portátiles-, pero evidentemente es mucho más práctico que el Circle Pad Pro, aquel despropósito que se acoplaba a la máquina para hacer las funciones de segundo stick. Pese al añadido, Nintendo no parece dispuesta a dar un gran uso al segundo stick.

No hay planes para actualizar los juegos antiguos y hacerlos compatibles con la nueva palanca y tampoco contemplan que su uso sea imprescindible, algo que encaja con esa idea de no dejar en la estacada al resto de usuarios. "De hecho, vamos a mantener la Nintendo 2DS -se puede adquirir a partir de los 110 euros- porque es una puerta de entrada perfecta y más barata a los videojuegos y no está funcionando nada mal en ventas, sobre todo entre los más jóvenes", aclara Curdi. Así, la palanca C será compatible con títulos como 'The Legend of Zelda: Majoras Mask', 'Monster Hunter 4 Ultimate', 'Resident Evil: Revelations' y 'Kid Icarus Uprising'. Además del segundo stick, la máquina cuenta con dos nuevos botones traseros -ZL y ZR- que se suman al L y el R que ya descansaban en la misma posición.

La pantalla 3D, la verdadera razón

Mucho más sorprendente resulta la mejora efectuada sobre la pantalla superior, la que puede mostrar imágenes en tres dimensiones sin la necesidad de que el usuario se ponga gafas. Hablemos claro: el uso de esta funcionalidad en la 3DS original era casi anecdótico. A nada que el jugador moviera un poco la consola o la cabeza, el efecto 3D se perdía y uno se encontraba con una imagen doble bastante desagrable. La nueva máquina corrige este problema de forma espectacular.

¿Cómo lo hace? La cámara interna que monta el dispositivo reconoce la posición de la cara del jugador y adapta la imagen en tiempo real a su vista para mantener el efecto. Funciona realmente bien y es, posiblemente, el mayor logro de la New Nintendo 3DS, pues ofrece lo que prometió en su momento: un 3D sin gafas. Solo una pega en este sentido: la resolución de la imagen sigue siendo baja y, por eso, es casi más interesante la New 3DS que la New 3DS XL, donde los 'pixelotes' son menos evidentes ya que en ambas propuestas la resolución es la misma. Como contrapartida, la batería de la versión más generosa en dimensiones tiene mayor duración.

El interior de la máquina

Menos evidentes, aunque igual de importantes, son las mejoras articuladas en el interior de la consola. La CPU es algo más potente y eso se notará no solo en los juegos exclusivos, si no en la velocidad a la que se descargan y cargan las aplicaciones, además de en el navegador web que implementa. Además, la máquina será compatible con NFC y por lo tanto podrá leer y escribir en los Amiibo, las figuritas que han devuelto a Nintendo al mundo del juguete, y de las que ya han vendido más de 5,7 millones de unidades en todo el mundo.

Con un lanzamiento escalonado -se han vendido ya más de 1,4 millones de unidades en Japón-, las dos nuevas máquinas se lanzarán al mercado en España el próximo 13 de febrero. La New Nintendo 3DS lo hará a un precio en torno a los 170 euros y vendrá en dos colores -blanco y negro- aunque se podrá personalizar con diferentes cubiertas que saldrán a la venta. La versión XL tendrá un precio en torno a los 200 euros y llegará en negro y azul metalizados. Se van a poner dos ediciones especiales de esta última, acompañadas con el 'The Legend of Zelda: Majoras Mask' y el 'Monster Hunter 4 Ultimate', respectivamente, en torno a los 230 euros. Pese a lo que se comenta en los foros, Curdi deja claro que ninguno de los dos packs se ha agotado: "Solo hay que buscar mejor".

Así las cosas, cabe hacerse una pregunta: ¿Merece la pena adquirir la nueva versión si ya se tiene la antigua? Y la respuesta no es sencilla. Si la pantalla en 3D está entre las prioridades del usuario, la adquisición es prácticamente obligada. Si no es así, será cuestión de mirar si los títulos exclusivos nos convencen, aunque tener como punto de partida 'Xenoblade Chronicles' es de lo más seductor. En cualquier caso, habrá que armarse de paciencia porque pasar el perfil de la antigua máquina a la nueva no es precisamente una tarea rápida. Lo que está claro es que si hay alguien que aún no tenga la Nintendo 3DS, esta puede ser la mejor oportunidad.