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El bar asaltado por los dos ladrones en Náquera. LP
Un guardia civil y un ladrón resultan heridos en un tiroteo en Náquera

Un guardia civil y un ladrón resultan heridos en un tiroteo en Náquera

El agente se encontraba fuera de servicio y se vio obligado a disparar al ser apuñalado por uno de los delincuentes que sorprendió en pleno robo

JAVIER MARTÍNEZ

VALENCIA.

Sábado, 30 de junio 2018, 00:38

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Un guardia civil resultó herido el jueves por la noche al ser apuñalado por un ladrón en la puerta de un restaurante de Náquera. El agente repelió la agresión con su arma reglamentaria e hirió al delincuente tras disparar primero al aire para tratar de evitar su huida. Los hechos ocurrieron en el polígono industrial Los Vientos, cuando el guardia civil acudió al bar que regenta su esposa tras saltar la alarma de robo.

Eran las once de la noche. El agente se encontraba fuera de servicio, por lo que llamó primero al 062, el teléfono del Centro Operativo de Servicios (COS) de la Guardia Civil, y se desplazó con su coche al restaurante. Su mujer le acompañó. Tardaron muy pocos minutos en llegar y sorprendieron a dos ladrones en pleno robo.

El guardia civil había visto en su teléfono móvil las imágenes grabadas por una cámara del sistema de videovigilancia que instalaron recientemente en el bar. Sabía que los delincuentes podrían estar dentro. La puerta estaba forzada. Cogió su pistola, le dijo a su mujer que se alejara y se identificó a gritos: «¡Guardia Civil!».

El agente acudió al restaurante que regenta su mujer cuando saltó la alarma de robo

Una patrulla del cuartel de Bétera se dirigió también con urgencia al lugar, pero el matrimonio llegó antes porque vive muy cerca del restaurante. La situación parecía que estaba controlada hasta que los dos delincuentes salieron de forma sorpresiva y se abalanzaron sobre el guardia civil, que retrocedió sobre sus pasos y disparó al aire.

Fueron momentos de gran tensión y peligro en los que se rozó la tragedia. Uno de los ladrones asestó un navajazo al agente, aunque este pudo parar con su brazo izquierdo el arma blanca. Luego trataron de robar el coche del matrimonio, pero el guardia civil había quitado la llave del contacto como precaución tras bajarse del vehículo.

El agente se vio obligado a disparar con su pistola ante el riesgo que corría su vida y la de su mujer, que contempló con mucho miedo y preocupación la agresión que sufrió su marido. Tras el tiroteo, los dos delincuentes escaparon en un coche que habían aparcado en las inmediaciones, pero sufrieron un accidente en el acceso de la A-7 en el término de Náquera y continuaron la fuga a pie.

Rastros de sangre

Los primeros guardias civiles que llegaron a polígono industrial auxiliaron a su compañero y pidieron una ambulancia para que lo trasladara a un hospital. Poco después, una veintena de patrullas de la Guardia Civil montaron un operativo urgente en las carreteras de Náquera y otras poblaciones cercanas para buscar a los ladrones. Varios rastros de sangre hallados en el lugar indican que uno de los delincuentes resultó herido al ser alcanzado por uno de los disparos que realizó el agente apuñalado.

Un equipo de Policía Judicial de la compañía de Llíria se hizo cargo de las investigaciones para identificar y detener a los ladrones. Los agentes inspeccionaron el lugar donde se produjo el tiroteo y recogieron los casquillos.

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