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Lunes, 22 de mayo 2017, 23:57
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El Ayuntamiento aprobó el pasado viernes en la junta de gobierno desestimar el recurso de un particular y confirmar sendas multas de 1.001 euros cada una por el reparto de tarjetas de prostíbulos en la calle a menos de 200 metros de un colegio, en la avenida Cortes Valencianas.
La ordenanza contra la prostitución callejera indica que se sancionará tanto la petición de servicios sexuales como la publicidad de los mismos, independientemente del soporte en el que se encuentre. En este caso fueron tarjetas de pequeño tamaño, de las que se dejan amontonadas en los cajeros automáticos o sujeta al limpiaparabrisas.
Las sanciones fueron impuestas en noviembre de 2015 y en mayo del año siguiente, a la misma persona según indicaron ayer fuentes conocedoras del proceso. La normativa de Valencia señala que la sanción es muy grave cuando se produzca a menos de 200 metros de un colegio o de un jardín al ser susceptible de afectar a menores.
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