Un policía local hiere de un disparo a un compañero en Náquera

valencia. Un policía local hirió de un disparo accidental a su compañero de patrulla sobre las diez y media de la mañana de ayer en el retén municipal de Náquera. La víctima, que recibió el impacto de bala en el glúteo, fue trasladada con urgencia a un hospital en un vehículo policial.

El policía herido fue auxiliado de inmediato por su compañero y otro agente que acudió corriendo al oír el disparo. La bala quedó alojada en la pierna de la víctima, según informaron fuentes médicas. El agente se taponó el orificio de entrada con la ayuda de sus compañeros antes de que lo trasladaran al hospital.

El disparo accidental se produjo cuando el policía manipulaba su pistola reglamentaria, una Glock de reciente adquisición, en circunstancias que no han trascendido. Los dos agentes implicados en el grave incidente pertenecen a la Policía Local de Náquera desde hace más de diez años, según informaron fuentes municipales.

La Guardia Civil de Llíria se ha hecho cargo de las investigaciones y realizará las correspondientes diligencias para entregarlas en el juzgado. El agente herido fue intervenido ayer por la tarde en La Fe para extraerle la bala que tenía alojada en la pierna. El autor del disparo accidental, que está muy afectado, visitó a su compañero en el hospital y volvió a disculparse.

Las mismas fuentes municipales señalaron que el Ayuntamiento de Náquera tiene previsto abrir un expediente disciplinario para determinar si el accidente se podría haber evitado o fue un hecho fortuito. Una negligencia en el manejo del arma por parte de un policía conlleva una responsabilidad penal por un delito o falta de imprudencia, así como su responsabilidad civil y la subsidiaria de la administración, según informaron fuentes jurídicas.

Pero si el instructor del expediente considera que el disparo se produjo en unas circunstancias excepcionales y se debió a un caso fortuito, el agente sería absuelto y se excluye la declaración de responsabilidad civil.

El 2 de marzo de 2009, un agente de la Policía Local de Pedralba resultó herido grave al recibir un disparo accidental de su superior cuando se encontraban en las dependencias policiales. El agente herido fue trasladado con urgencia al Hospital La Fe de Valencia. Los médicos tuvieron que extirpar un riñón y el bazo a la víctima.

Otro dos policías locales resultaron heridos por un disparo accidental durante una práctica de tiro que realizaban en la central de la avenida del Cid. Los hechos ocurrieron el 15 de octubre de 2009, cuando uno de los agentes se dispuso a limpiar la pistola, todavía cargada. La bala atravesó la pierna a uno de los policías y acabó en el tobillo de otro.