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Los rifles y escopetas que la Policía Local intervino al sospechoso, uno de ellos con mira telescópica. :: policía local de valencia
Confiscadas cinco escopetas a un hombre que intentó asaltar su casa con una sierra

Confiscadas cinco escopetas a un hombre que intentó asaltar su casa con una sierra

La Policía Nacional captura a un maltratador sexagenario que se ocultó con una recortada tras herir de un puñetazo a su mujer en Valencia

J. A. MARRAHÍ

Miércoles, 6 de enero 2016, 00:10

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Intentando cortar la verja de su propia casa con una sierra. Así fue sorprendido un hombre al que la Policía Local retiró ayer cinco armas largas y abundante municipio en un domicilio de Valencia después de protagonizar una acalorada discusión con su familia.

Los hechos se produjeron a falta de pocos minutos para las siete de la mañana, en la calle Mariano de Cavia. Según fuentes de la Policía Local de Valencia, los testigos dieron la voz de alarma ante la extraña conducta del individuo, que al parecer podría estar afectado por problemas psicológicos.

Horas antes, sobre la medianoche, había mantenido una fuerte discusión con su familia. Por causas que no han trascendido abandonó su domicilio y, más tarde, regresó a la vivienda con una sierra. Con la herramienta trató de cortar la verja «en contra de la voluntad de sus familiares», como describe la policía.

Gracias a la rápida intervención de las patrullas municipales la situación no fue a más. Los agentes lo identificaron, se entrevistaron con sus familiares y supieron que almacenaba un buen número de armas y munición en la planta baja de la vivienda. Ante el estado de nervios del hombre, determinaron que la mejor opción era confiscar por seguridad las tres escopetas y dos rifles que hallaron. Una de las armas disponía de mira telescópica.

Según fuentes policiales, el propietario posee los permisos reglamentarios, pero consideraron oportuno intervenir el material temporalmente por si el vecino decidía emplearlo contra su familia o contra sí mismo. Las armas han sido depositadas en dependencias de la Guardia Civil.

En Paterna se vivió hace unos días una situación parecida de gran tensión. La Policía Nacional detuvo a un presunto maltratador de 63 años que golpeó a su mujer y luego se escondió en un dormitorio junto a una escopeta de cañones recortados y dos cartuchos.

El agresor propinó un puñetazo a la víctima en el pecho y la mujer salió a la calle en busca de ayuda. Cuando llegaron los primeros policías la encontraron muy nerviosa. Supieron que el hombre se había encerrado en un dormitorio de su vivienda con un arma, lo que obligó a los agentes a extremar precauciones y a protegerse con chalecos antibalas.

Los policías lograron reducir al sospechoso sin que se produjeran disparos. Había puesto su escopeta de caza en la cama de matrimonio, encima de la almohada y a escasa distancia de donde se hallaba. Pero finalmente no llegó a abrir fuego.

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