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J. M. O.
Jueves, 31 de julio 2014, 23:28
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Valencia. Uno de los presos más peligrosos de la cárcel de Picassent obligó el pasado miércoles a los trabajadores de la prisión valenciana a poner en riesgo sus vidas para salvar la del resto de reclusos. El presidiario, de origen marroquí, trató alrededor de las 12.30 del mediodía de incendiar su celda prendiendo fuego a su colchón, aunque por precaución estos materiales ya están fabricados a propósito para que la llama no se coja y no alcanzó su objetivo.
A pesar de todo, sí que desprendió una gran cantidad de humo, que impedía a los allí presentes ver y respirar correctamente. Ante esta situación, los trabajadores se vieron obligados a actuar con rapidez y a evacuar la zona de la cárcel donde se encuentran los reclusos más peligrosos, según indicaron desde el sindicato Acaip, que considera que los funcionarios «merecen un reconocimiento público por parte de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias».
Al producirse los hechos en el sector con más riesgo de la prisión, los trabajadores tuvieron que extremar lo máximo posible su actuación «a la hora de desalojarlos hacia el patio». Sobre todo porque no es la primera vez que algún recluso «provoca un incendio con el fin de llevar a cabo un ataque hacia los funcionarios» allí presentes.
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