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El cuerpo sin vida de Mustafá yace en el asfalto de la ronda norte. :: toni blasco
Temporero y habitante de la ruina

Temporero y habitante de la ruina

El ciclista atropellado vivía en una fábrica abandonada y cruzó la ronda en bici con una pesada garrafa de agua para ducharse

TONI BLASCO

Jueves, 19 de junio 2014, 00:00

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Una vida desgraciada y complicada. Una muerte trágica a los 39 años, lejos de su tierra natal: Ghana. El inmigrante africano fallecido en la ronda norte se ganaba la vida como temporero y ocupaba una nave de las afueras.

Al parecer, Mustafá Alí, de 39 años, cruzó en su bicicleta para aprovisionarse de agua para ducharse. Después de llenar el recipiente de 30 litros en una fuente cercana pedaleó con la pesada garrafa en una mano mientras sostenía el manillar con la otra.

Así pretendía llegar hasta la vieja fábrica en ruinas donde habitaba junto a otros catorce inmigrantes. Ellos lo conocían sencillamente como Alí. Algunos estaban cerca cuando fue atropellado, pero su situación irregular y el miedo a ser detenidos les empujó a escapar.

LAS PROVINCIAS localizó ayer a sus amigos. Conviven juntos desde hace 4 años y ocupaban antes el viejo cuartel de Tavernes Blanques. Los ojos de Mohamed se enrojecen de pena. «Nos pusimos a ver el partido de fútbol entre Brasil y México, pero Alí se marchó a la fuente a por agua para ducharse al día siguiente. Quisimos convencerlo de que luego le acompañaríamos, pero contestó que tenía que madrugar para ir a trabajar».

La víctima realizaba trabajos de recolección de fruta. El agricultor que lo contrataba llamó a su teléfono móvil porque no se había presentado en el trabajo. Los propios compañeros contestaron que lo habían atropellado. Todavía no conocían el trágico desenlace. «Pensábamos que estaba herido».

La víctima llegó hace 13 años a Tenerife, donde tiene un único pariente. Después recaló en Valencia. «Era una persona que no creaba problemas. Aquí todos nos apoyamos porque no tenemos a nadie que nos ayude. ¿Dónde tienen ahora a Alí, donde está ahora?», pregunta Mohamed angustiado.

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