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MARINA COSTA
Jueves, 5 de junio 2014, 00:02
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Tiró un artefacto ardiendo por encima de la valla de una empresa de grúas y neumáticos y se alejó unos 500 metros del lugar para ver cómo ardían las instalaciones. Los agentes que lo localizaron poco después, gracias a las declaraciones de un testigo, afirman que este conocido vecino de Paterna, reincidente y con un hermano al que se le achacan más de doce incendios, estaba «sentado en la calle, mirando el fuego y bebiendo cerveza».
La rápida intervención de un oficial y un agente de la Unidad de Vigilancia Industrial y Forestal de la Policía Local de Paterna y el testimonio clave de un vecino, que vio a esta persona lanzar el artefacto, permitieron el martes localizar a este individuo, que arrastra una larga lista de antecedentes policiales por robo con fuerza, agresiones y resistencia a agentes de la autoridad, además de varios delitos de daños.
El sospechoso «se hallaba en la calle, contemplando desde la distancia las llamas y la densa columna de humo», tal y como detallaron los agentes. Cuando la policía le preguntó, él negó los hechos, pero el testigo que lo había visto y había dado una descripción previa, lo reconoció «sin género de dudas». El detenido fue trasladado al retén y puesto a disposición judicial.
Fuentes de la empresa incendiada, una vez sofocado el fuego, detallaron que la instalación había sufrido daños en neumáticos, recambios de piezas de grúa, un motor y tres remolques de camión.
El hecho más curioso es que esta persona ya había sido identificada como autor de incendios de matorrales y arbustos en la misma zona y que, además, tenía un hermano detenido en varias ocasiones por el mismo motivo. Más de una docena de incendios están detrás de estos dos hermanos que mantenían en jaque a la Policía Local de Paterna.
Desde octubre a diciembre de 2013 se produjeron diversos incendios, en la partida de Los Molinos, concretamente en la calle Los Molinos y la prolongación de Santísimo Cristo de la Fe.
Aunque en un primer momento se sospechó de ambos familiares, finalmente sólo se pudo detener a uno de ellos, tras un operativo policial.
Además, en este caso, se le pudo imputar tan sólo un «delito de daños», pese a que uno de los incendios llegó a afectar «seriamente al sistema de control de la Línea 1 de metro de FGV, a su paso por Paterna, lo que supuso el mal funcionamiento de los pasos a nivel con el riesgo que ello conlleva», según recalcaron ayer fuentes municipales.
La Policía Local lleva meses vigilando la conducta de estos hermanos vecinos de Paterna, que arrastran un largo rosario delictivo. La concejala de Policía, Sara Álvaro, quiso destacar la diligencia de los agentes que intervinieron en la detención, «demostrando una gran aptitud y profesionalidad en el desarrollo de su labor».
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