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Un rincón de Menasalbas con agua. Alberto Ferreras | Virginia Carrasco

Sin agua, no hay dinero

Menasalbas pasa de exportar 40 camiones semanales, a solo diez y ve como la sequía está estrangulando su economía

Javier de Iruarrizaga

Menasalbas (Toledo)

Domingo, 19 de noviembre 2017

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Desde principios de noviembre la población de Menasalbas no tiene acceso a agua entre las nueve de la noche y las nueve de la mañana. El ayuntamiento de la ciudad no riega los jardines públicos y sus fuentes de agua están vacías a la espera de una precipitación que las pueda volver a la vida. Sin embargo, lo más grave para este municipio toledano, es lo que está pasando con la ganadería, principal actividad y motor económico de la zona. La producción en este área ha bajado en un 75% desde que hace tres meses se impusieran cortes de agua para uso agrícola y ganadero, ante la precaria situación hídrica de la localidad.

Esa medida se tomó el 15 de agosto con el resto de las autoridades de la Mancomunidad de Municipios Cabeza del Torcón, afectando a un total de 90.000 cabezas de ganado, según sus cooperativas. «Nuestra esperanza era que lloviera, pero desde la fecha no ha sucedido y ya se ha hecho urgente tomar nuevas medidas», dice Marina García, alcaldesa de Menasalbas, miembro de la mancomunidad.

Esta localidad de casi 2.800 habitantes situada a 40 kilómetros al suroeste de Toledo, ha construido su economía en base a la exportación de carnes, principalmente hacia Emiratos Árabes Unidos y Egipto, entre otros. Sin embargo, la sequía por la que pasa está repercutiendo de manera dramática en los negocios con esos compradores. Antes de los cortes, la ciudad exportaba alrededor de 40 camiones semanales de ganado vacuno. Hoy, tras la limitación al consumo, son sólo diez son los camiones que alcanzan a salir. Esto se traduce en un descenso de entre 1.000 y 1.200 cabezas de ganado exportadas al mes, exclusivamente por carencia de agua.

En este escenario, los ganaderos han hecho saber al ayuntamiento que los animales beben mucho, más aun en verano, dentro del rango de 70 y 80 litros de agua diarios. Ahora, si se les raciona el suministro, la carne se hidrata menos y por ende es de peor calidad. «No llega a ser todo lo buena que era con anterioridad. Menasalbas se ha hecho una reputación no sólo dentro de la comarca, de Castilla-La Mancha, también a nivel internacional por su carne de ternera. Con la sequía estamos poniendo eso en riesgo», reflexiona la alcaldesa, quien señala que «sin ayuda, estos pueblos se quedan desiertos». Si hundimos la economía de la ganadería, industrias cárnicas y mataderos, pues no nos queda nada. Somos una comarca destinada a la desertización y a la muerte en concreto», añade.

«Cada año llueve menos»

Como la situación no ha mejorado desde agosto, a principios de noviembre el ayuntamiento tuvo que tomar medidas más drásticas. «Por esa realidad, se hizo urgente empezar con los cortes a la población, poniendo un límite de 200 litros diarios por persona», indica la regidora.

«El problema es que cada año llueve menos», señala Gregorio Fernández, empleado a cargo de servicios del ayuntamiento. Y complementa: «Esto genera además un tremendo problema por las averías. Las cañerías al estar vacías cogen aire, y al volver a darse el agua la presión destruye las que estén débiles».

El funcionario deja de manifiesto el hecho de que la presa que abastece a la ciudad se encuentra en niveles inéditos. De la misma, el depósito de agua de la ciudad se encuentra a medio llenar, lo que obliga a cortar el suministro al menos doce horas diarias para poder abastecer a todos. «El agua va por caída libre, sin motor alguno. Eso significa que si no hiciéramos restricciones, la mitad de la población no tendría nunca agua». Y explica que por eso han tenido que cortar los riegos, vaciar las fuentes e intentado concienciar a la gente para que use responsablemente el recurso.

Por ello, ante el temor de que esta situación se siga repitiendo año a año, la mancomunidad busca nuevas medidas. «Esperamos que llueva antes de Navidad. De no ocurrir pienso solicitar al gobierno central una reunión para que nos tengan en cuenta dentro del presupuesto del próximo año», dice la alcaldesa, quien considera necesario hacer una inversión en infraestructura para la ampliación del embalse de la zona, que como se ha probado, no da abasto.

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