Una chica se coloca una cámara oculta en el trasero para ver cuánta gente se lo mira

¿Alguna vez has tenido la sensación de que al pasar por delante de alguien en la calle se te queda mirando el trasero? Pues a veces, esas sensaciones están en lo cierto, como acaba de corroborar un experimento organizado por Movember, una organización dedicada íntegramente al estado de salud de los hombres. El experimento consiste en que una chica se pone unas mallas ajustadas y se coloca una cámara oculta en la parte trasera del pantalón para comprobar cuánta gente se queda mirando sus posaderas. El resultado es llamativo: 50 personas -tanto hombres como mujeres- en apenas unos minutos.

La iniciativa, lejos de querer señalar algún tipo de acoso -a diferencia de otras cámaras ocultas, como la de la agencia Rob Bliss Creative- busca concienciar al sector masculino sobre el cáncer de próstata. «Las mujeres que usan cámaras ocultas recuerdan a los hombres que se miren también a sí mismos», explica la organización. Este cáncer es el segundo en causar muertes en los hombres estadounidenses.