Sandra Gómez sí tendrá rival en el PSPV de Valencia

Sandra Gómez se presentó como candidata a la secretaría general del PSPV en la ciudad de Valencia blindada de institucionalismo autonómico. El aura de Puig rodeó el anuncio de su candidatura. A su izquierda se situó el portavoz socialista en Les Corts, Manolo Mata, y vicesecretario del PSPV. A su derecha, ni más ni menos que la presidenta del Consell Jurídic Consultiu, Margarita Soler. Dos personas de la máxima confianza del presidente de la Generalitat.

Exactamente dos semanas más tarde, Girau ha confirmado su intención de presentar su candidatura cuando se abra el proceso de elecciones internas a nivel comarcal. Gómez pasa de candidata en solitario a no saber si será o no será.

Porque la aspirante Girau no es cualquiera en el PSPV. Es uno de los rostros fijos en los actos que el entorno del entonces diputado José Luis Ábalos organizó en Valencia a Pedro Sánchez en su resurrección como secretario general de los socialistas españoles. Ahí estaba siempre Ábalos, y Mercedes Caballero. Y Girau. A día de hoy, el que fuera diputado crítico es el secretario de Organización de Ferraz, número dos del PSOE. Caballero se ha convertido en su sucesora al frente del PSPV en la provincia de Valencia. Y ahora habrá que ver qué ocurre con Girau en la capital.

«Tengo intención de presentar mi candidatura. Aún no se ha abierto el plazo para hacerlo oficialmente dentro del proceso comarcal, pero sí quiero optar», admitió Girau, quien consideró que la rivalidad no tiene por qué generar tensiones con Gómez, «al menos por mi parte, estoy segura de que la actividad en el Ayuntamiento de Valencia continuará como hasta ahora». La concejal de Deportes recordó ayer que «las primarias en España las hemos impulsado los socialistas, es un ejercicio de democracia interna que debe respetarse y valorarse».

Fuentes del PSPV en la ciudad de Valencia señalan que la disputa «es igualada, se trata de unas primarias de mucho trabajo porque no son tantos militantes pero los suficientes como para que nadie tenga garantizado el control total de la situación». En este sentido una destacada exdirigente socialista en la capital indica que, gane quien gane, «tendrá que contar con el rival, sean los afines a Puig o a Sánchez», y precisamente por esa obligación de pactar se explica el anuncio de Girau, un modo de medir fuerzas para evitar que Sandra Gómez considere que lo tiene todo hecho y puede prescindir de los críticos a su candidatura.

De esta manera, el PSPV escenificará un tercer 'round' de la batalla entre el sector sanchista y el más afín a Puig. El primer asalto fue para Ábalos, convertido en número dos del partido tras la debacle de Susana Díaz. El segundo cayó del lado del presidente de la Generalitat, que derrotó a Rafa García y salió reelegido secretario general del PSPV. La campana del tercer tiempo ha sonado.