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Dimite María Dolores Navarro, la consejera de la futura TVV que incurría en incompatibilidad

Dimite María Dolores Navarro, la consejera de la futura TVV que incurría en incompatibilidad

La representante sindical en el consejo rector ha ocupado también durante los últimos seis meses un puesto de alta dirección en UGT

A. CERVELLERA

Jueves, 27 de abril 2017, 18:39

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María Dolores Navarro Giménez, miembro del Consejo Rector y secretaría general de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo del País Valenciano (FeSMC UGT-PV) presentó el miércoles su dimisión ante el máximo órgano de dirección de la nueva radiotelevisión autonómica.

Tal y como avanzó LAS PROVINCIAS, la consejera incurría en incopatibilidad, ya que Navarro ostentaba al mismo tiempo un puesto en el ente público y otro de alta direcciónen el sindicato UGT. Una situación que incumple la Ley 6/2016 de 15 de julio, del Servicio Público de Radiodifusión y Televisión de Ámbito Autonómico, la norma que permitirá poner en marcha 'a punt'. La ley establece que ninguno de los representantes del consejo rector podrá ostentar puestos de 'alta dirección en partidos políticos u organizaciones sindicales o empresariales'.

La norma también destaca que si un miembro del órgano se encuentra en alguno de los supuestos de incompatibilidad especificados, dispone de tres meses para adecuar su situación. Un plazo que se habría incumplido ya que Navarro se incorporó su cargo en el órgano de la Comisión Valenciana de Medios de Comunicación (CVMC) desde octubre de 2016. Fue el miércoles, tras seis meses en en el órgano de la nueva RTVV, cuando formalmente decidió dimitir.

El consejo rector está formado por nueve representantes. El presidente, Enrique Soriano, y cinco consejeros designados directamente por Les Corts (a los que corresponde uno de cada partido) son los miembros permanentes. Además, también ocupan asientos en este órgano otras tres personas que estarán en la CVMC temporalmente hasta que se constituyan el consejo de Ciudadanía y el Consejo audiovisual. Uno de estos puestos corresponde a los sindicatos, que era el ocupado por Lola Navarro.

Las agrupaciones pactaron que el puesto tendría que ser rotatorio. Cada seis meses el representante dimitiría para poder efectuar el relevo y siempre habría una comunicación constante entre las tres partes. Navarro fue nombrada a propuesta de UGT, y tras su salida le corresponde a CCOO ostentar el cargo hasta que sea el turno de Intersindical.

Algunas fuentes señalan que la elegida para sustituir a Navarro será María Soledad Fernández, que actualmente ocupa la Secretaría de Acción sindical de Comisiones Obreras-FSC del País Valenciano.

Posibles consecuencias

Las fuentes consultadas por este diario advirtieron de que la eventual situación de incompatibilidad en la que ha incurrido Navarro durante los últimos meses podría afectar a la legalidad de los acuerdos adoptados por el consejo rector a lo largo de los últimos meses. Y en especial, remarcaron, aquellos en los que se haya producido una votación y el sentido del apoyo mostrado por esta consejera haya podido influir o determinar el acuerdo adoptado por este órgano.

Entre estos, el que resulta más significativo es, obviamente, el del proceso de selección del responsable de la dirección general, cargo para el que fue elegida Empar Marco tras imponerse en la última ronda a Josep Ramón Lluch y Salvador Enguix. Las fuentes jurídicas consultadas apuntaron que la participación de Navarro en este proceso y el voto con el que respaldó a alguno de los candidatos podría dejar al borde de la ilegalidad todo el procedimiento.

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