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La portavoz de Compromís, Mireia Mollà. :: irene marsilla
La fiesta de Nochevieja de Mireia Mollà, portavoz de Compromís

La fiesta de Nochevieja de Mireia Mollà, portavoz de Compromís

Los agentes aseguran que la concejal intentó «disfrazar» su presencia en un local sin licencia y con más del doble del aforo permitido

FERRIOL MOYA

Martes, 17 de enero 2017, 12:06

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La celebración de la pasada Nochevieja le puede terminar costando un disgusto a la portavoz de Compromís en Les Corts y concejal de Relaciones Institucionales del Ayuntamiento de Elche, Mireia Mollà. El Sindicato Profesional de Policías Municipales dirigió el lunes un escrito al alcalde de Elche en el que recrimina a la primer teniente de alcalde del consistorio ilicitano su presencia en una «fiesta ilegal» celebrada en la pedanía de Torrellano.

No sólo eso. El escrito reprocha que Mollà haya tratado de sostener hasta la fecha que su presencia en los hechos fuera a requerimiento de los vecinos y para evitar posibles altercados. Según se explica, Mollà habría intentado «disfrazar» que en realidad «se encontraba en el interior de dicha fiesta», celebrada en un local sin la preceptiva licencia municipal y con exceso de aforo y que, para tratar de resolver la situación, hasta telefoneó a altas horas de la madrugada al Jefe de la Policía Local.

Los hechos tienen lugar la pasada Nochevieja. Agentes de la policía local se personan en una Cafetería en la que tenía lugar una «fiesta ilegal» -según el relato de este sindicato- puesto que el establecimiento «carecía de la preceptiva licencia municipal para la celebración de dichos actos e incumpliendo todas las normas, permisos y leyes habidos y por haber para este tipo de espectáculos». En la fiesta, con equipo de música y disc-jockey incluido, se añade, «existía una gran afluencia de público» y se sobrepasaba «en más del doble el aforo permitido» en un establecimiento que sólo tenía licencia de cafetería-bar.

El relato de la policía en este comunicado del sindicato señala que Mollà trató de disfrazar su presencia en el local argumentando que había sido requerida por los vecinos para que mediara en la intervención policial con el objeto de evitar altercados. Y aquí es donde viene la discrepancia. «Como bien sabe ella -se señala- no la llamaron los vecinos para que mediara en la intervención, sino que se encontraba en dicha fiesta y fue requerida por el propietario de dicho establecimiento para que interviniese en la actuación policial». «Su actuación deja mucho que desear», se señala en otro momento.

Llamada al jefe de policía

La actuación de Mollà, por lo que se desprende del escrito remitido, incluyó la llamada al jefe de la policía local de Elche. De hecho, el texto hace referencia a ese hecho y considera que no es de recibo «que un cargo público pueda realizar este tipo de injerencia, menospreciando con ello la actuación de los agentes que allí se desplazaron». El documento defiende la actuación de los policías locales y constata que, afecte a quien afecte «cumple las normas y ordenanzas municipales que emanan de este propio ayuntamiento, sin dejarse manipular, dejando al lado cualquier tipo de interés y evitando siempre que haya la menos sospecha de parcialidad en su actuación».

Las fuentes consultadas por este diario alertaron de la gravedad de las acusaciones del Sindicato de Policías sobre la primera teniente de alcalde del Ayuntamiento de Elche. Por un lado, por lo que supondría el hecho de haber intentado sostener que no estaba en la fiesta denunciada al alegar que en realidad había sido llamada por los vecinos. Y en segundo lugar, por su eventual gestión dirigida, probablemente, a tratar de condicionar la actuación de los agentes de policía. «Doblar el aforo permitido no es una cuestión administrativa, sino de seguridad. Realizar algún tipo de gestión dirigida a procurar que la policía hiciera la vista gorda ante estos hechos, se remarcó, equivaldría a la definición de tráfico de influencias, es decir, tratar de utilizar la influencia personal en ámbitos de gobierno o incluso empresariales, a través de conexiones con personas, y con el fin de obtener favores o tratamiento preferencial.

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