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Taroncher pudo facturar más de dos millones sin licitación pública

Taroncher pudo facturar más de dos millones sin licitación pública

La UDEF sospecha que el empresario utilizó una sociedad patrimonial para blanquear dinero en Luxemburgo

J. C. F. / A. G. R.

Martes, 9 de febrero 2016, 09:34

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José Miguel Pérez Taroncher, el empresario amigo de Serafín Castellano, se vio beneficiado por el exconseller, que le concedió contratos por obras sin acudir a los procedimientos legales, «observando muchas veces la fragmentación de los importes». El sumario del caso Avialsa, cuyo secreto se levantó la semana pasada, destapa que las empresas de Taroncher -Construcciones Taroncher y Construccciones DV Cuatro (esta última, a nombre de sus hijos)- «facturaron más de dos millones de euros sin acudir a ninguna licitación pública» entre los años 2007 y 2009.

La UDEF relata en su informe que Construcciones Taroncher experimentó un significativo aumento de su facturación, especialmente visible entre los años 2006 y 2007, cuando la mercantil lofgró multiplicar por tres su facturación, de 551.000 a 1.737.000 euros.

Respecto al origen de la facturación, la policía revela que la administración autonómica se convirtió en la gran valedora para el crecimiento y consolidación de esta firma. De hecho, entre 2007 y 2009, la firma del empresario amigo de castellano contrató con la Generalitat por valor de 2,9 millones de euros.

El mismo informe, incluido en el sumario del caso, detalla también que Taroncher tuvo la 'fortuna' que otras tantas y tantas mercantiles nunca han disfrutado en su relación comercial con la administración: el de lograr que la Generalitat atienda con celeridad sus deudas. En este caso, Taroncher presenta en 2007 un total de 1,3 millones de euros como pendientes de cobro de la administración autonómica y, sin embargo, en la contabilidad correspondiente a 2009 esa cifra es nula, «es decir, que habría cobrado íntegramente todo lo adeudado, lo que explicaría también el hecho poco frecuente de que disponga de una partida de 'Efectivo y otros activos líquidos'» que en 2009 ascendía a casi un millón de euros.

La UDEF constata la buena salud financiera de la mercantil propiedad del amigo del exconseller, un hecho que no tiene nada de delictivo, «si no fuera por imputársele la obrtención de contratos con la administración de la Comunitat Valenciana sin acudir a los procedimientos ordinarios, todo ello según el denunciante Alandi». El informe alude también a Construcciones DV Cuatro, inscrita en el registro a mediados de 2009 a nombre de los hijos de Taroncher , y que desde 2010, logró contratos de la administración valenciana que, hasta 2013, superaron los 450.000 euros.

La investigación apunta a que Taroncher y Castellano tendrían negocios conjuntos, que habrían realizado dos compraventas inmobiliarias en las que formalmente aparecen las esposas de ambos -la de Taroncher fue durante años empleada del grupo parlamentario popular de Les Corts-.

Taroncher es también socio y administrador único de una sociedad patrimonial, Jopeta Patrimonios, constituida con un capital social inicial de 900.000 euros, «no guardando correlación alguna ese capital con los ingresos legales atribuibles» a Taroncher. «La única operativa que se le atribuye (...) es la realización de transferencias internacionales de divisas a Luxemburgo, por casi 2 millones de euros, todas ellas en 2006, sin existir relación comercial que las justifique», se señala. El mismo informe advierte de que se trata de la tipología de «sociedad instrumental muy sospechosa de albergar procedimientos de blanqueo para derivar capitales a los circuitos económicos internacionales».

En la declaración de Taroncher, en diligencias previas, el fiscal le pregunta por transferencias de esa mercantil a Luxemburgo. El empresario se limita a señalar que le dio a su gestor de banco 100.000 euros «para que lo jugara en bolsa».

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