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Compromís-Podemos supera al PSPV pero el PP sigue primero

Compromís-Podemos supera al PSPV pero el PP sigue primero

Los populares pierden 550.000 votos y nueve diputados aunque conservan el liderazgo en la Comunitat mientras que los socialistas ceden su histórica hegemonía de la izquierda

BURGUERA

Lunes, 21 de diciembre 2015, 01:53

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valencia. Los resultados de las elecciones nacionales en la Comunitat resultan históricos, especialmente en la margen izquierda del electorado, ya que el PP continúa como la fuerza hegemónica entre los valencianos a pesar de la fuerte caída respecto a hace cuatro años: 550.000 votos menos, lo que supone pasar de 20 a 11 diputados. Sin embargo, entre las fuerzas antagonistas de los populares sí que se ha producido un cambio sustancial: el sorpasso, término italiano que resumía la esperanza histórica (y nunca conseguida) de los comunistas transalpinos de adelantar a la socialdemocracia. Mientras que a nivel nacional la candidatura de Pedro Sánchez supera ampliamente a la encabezada por Pablo Iglesias, en la Comunitat, nacionalistas y podemistas han barrido a los socialistas y les han arrebatado el liderazgo de la izquierda valenciana.

El bipartidismo cosechó en 2011 el 90% de los escaños. En esta ocasión, de los 32, populares y socialistas se reparten 18 diputados. La doble hegemonía ha quedado finiquitada y la principal víctima de ese quebranto es el PSPV, que en las anteriores elecciones generales tenía el dudoso orgullo de ser un claro segundón con un 26,7% de los sufragios. Ahora, ya, ni eso, ni el 20% de los votos ha logrado. Es la tercera fuerza, claramente superada por Compromís-Podemos, aupados en la Comunitat a una segunda posición con cinco puntos porcentuales más que los socialistas valencianos.

Contraponer los resultados de los anteriores comicios nacionales con los de ayer es pasar del día a la noche, y en ese fuerte contraste la principal beneficiada ha sido la coalición de nacionalistas y podemistas.

El PP ha perdido una gran parte del granero de votos que era la Comunitat, el PSPV ha dejado de ser el referente para la izquierda, Esquerra Unida también se queda fuera del Congreso de los Diputados y paga caro su empecinamiento en no pactar con Compromís-Podemos, una coalición que pasa en cuatro años de tener a un señor solo en el Congreso, Joan Baldoví, integrado en el Grupo Mixto y condenado a tirar de camisetas para llamar la atención, a contar desde ahora con nueve diputados.

La candidatura del exalcalde de Sueca obtuvo hace cuatro años 125.000 votos. Esa cantidad la ha quintuplicado en esta ocasión, lo que permite a los nacionalistas aspirar a tener grupo propio en Madrid, si es que la Mesa de la Cámara Baja lo permite, algo que se puede considerar como problable teniendo en cuenta los resultados a nivel nacional. Compromís -Podemos obtiene 140.000 votos más que el PSPV en la Comunitat. El pacto entre las formaciones de los círculos y las sonrisas naranjas no ha permitido a Iglesias superar a Sánchez; sin embargo, Oltra sí que se sitúa por encima de Puig. La coalición pasa en cuatro años de acaparar tan sólo el 0,5% de los votos nacionales a alcanzar el 2,69%, lo que les convierte en la sexta fuerza a nivel nacional, por encima de los dos partidos que lideran el independentismo catalán.

Cada vez peor

Los socialistas, de hecho, se quedan con menos de la quinta parte de los sufragios (19,9%), seis puntos porcentuales de los votos menos que hace cuatro años, pierden tres diputados y cerca de 170.000 apoyos ciudadanos. El electorado en la Comunitat da cada vez más la espalda al PSOE. En cuatro años, la caída es superior al 20%. Respecto a 2008, cuando registraron 1,1 millones de votos, la candidatura liderada por Ana Botella no recibe ni la mitad de sufragios.

Los populares no pueden presumir mucho tampoco respecto a lo que ocurrió hace cuatro años. En 2011, Mariano Rajoy recibió de la Comunitat casi 1,4 millones de sufragios, el 53% de todos los votos de las urnas valencianas y el 12% del apoyo nacional obtenido por el presidente del Gobierno, que en España logró nueve puntos porcentuales menos (44%) que en la Comunitat. Una hegemonía popular aplastante, entonces. Ayer, las cifras fueron mucho peores que hace cuatro años, sin embargo, el PP valenciano continúa siendo un puntal para la formación con sede en la calle Génova, ya que de nuevo casi el 12% de los votos populares salen de las urnas de la Comunitat y otra vez supera los porcentajes de voto nacionales.

Hemorragia de votos

Respecto a 2011, han perdido votos los populares, los socialistas, Esquerra Unida y UPyD. Entre todos ellos han sufrido una brutal hemorragia de 900.000 apoyos en la Comunitat. Esos sufragios valencianos se los han repartido integramente casi a partes iguales los partidos emergentes. Ciudadanos ha pasado de la nada (en 2011 no se presentó en la Comunitat) a 421.000 votos (la candidatura de Albert Rivera debe a los valencianos el 12% de todos sus apoyos a nivel nacional), mientras que Compromís, junto a Podemos, ha recibido 440.000 apoyos más que en 2011.

La aplastante concentración del electorado que acaparaban PP y PSOE de manera tradicional en la Comunitat ha pasado a la historia. Los trozos de la tarta se equilibran. Socialistas y populares dejan de atiborrarse y el pastel se reparte bastante más equitativamente, si bien los populares mantienen una diferencia de seis puntos porcentuales respecto al segundo partido, Compromís-Podemos, una distancia que se ha reducido drásticamente respecto al panorama que reflejaron las generalos de 2011, cuando el PP logró rebasar a los socialistas por la friolera de 26 puntos electorales. La lista de Rajoy obtuvo hace cuatro años en la Comunitat casi exactamente el doble de votos que la liderada por Rubalcaba. Esta vez, los populares han rebasado a nacionalistas y podemistas en cerca de 165.000 votos.

Las tradicionales migajas por la que se peleaban los partidos pequeños se han transformado cuatro años después. Sin embargo, dos de esos partidos que antes si contaban con representación en Madrid se quedan ahora sin nada: UPyD y EUPV. Esas salidas del Parlamento nacional son aún más dolorosa que la debacle socialista.

Detrás de los animalistas

El partido que fundó Rosa Díez ha perdido el 90% de todos sus apoyos y se queda como la séptima fuerza a nivel de la Comunita, por detrás incluso del Partido Animalista. Esquerra Unida (pasa de ser el tercer partido más votado en 2011 a situarse como la quinta tras las elecciones celebradas ayer) ha visto cómo se cierra otra de las pocas puertas electorales ante las cuales mantenía la esperanza de continuar en la primera línea de la política. Ricardo Sixto, que en 2011 logró ser diputado gracias a 169.000 sufragios, cuatro años después registra 111.000 y no continuará en Madrid. El cuarto puesto en la candidatura de Valencia que Compromís-Podemos aseguraban ofrecer a EU para un posible pacto, rechazada por los comunistas, acabó finalmente en manos de Rosana Pastor, y tanto la actriz como el número cinco de esa misma lista, Txema Guijarro, acabarán sentados en el Congreso de los Diputados.

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