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Bronca entre Moragues y Llombart en vísperas de presentar los presupuestos

El titular de Sanidad se enfrenta al de Hacienda por la ley de estabilidad y con los pagos sin consignación presupuestaria de fondo

J. C. F.

Viernes, 31 de octubre 2014, 00:05

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La elaboración de los presupuestos de una administración como la Generalitat constituye siempre un momento de tensión entre el titular de la cartera de Hacienda y el resto de responsables del Consell. De hecho, se dice que todo Ejecutivo es de alguna manera un gobierno de coalición entre el conseller de Hacienda y el resto del Gobierno. Y pese a que las cuentas que presenta hoy el Gobierno valenciano presentarán un significativo crecimiento -propio del escenario de recuperación económica que el Ejecutivo ya anticipa-, Juan Carlos Moragues está obligado a cuadrar unos presupuestos que serán observados con lupa en el ministerio de Hacienda. Hay más ingresos pero no son ilimitados.

La tensión entre consellers alcanzó esta semana su momento más álgido con Moragues y con el conseller de Sanidad, Manuel Llombart, como protagonistas. Las fuentes consultadas por este diario explican que uno y otro mantuvieron una discusión como consecuencia de la discrepancia expresada entre sus respectivos equipos a la hora de negociar la elaboración de los presupuestos de Sanidad para 2015.

El origen de las diferencias entre uno y otro departamento tiene que ver con el cumplimiento de la ley de estabilidad presupuestaria. Y en particular, con el pago de facturas y gastos sin consignación presupuestaria. Las fuentes del Palau consultadas por este diario explican que Sanidad habría trasladado la conveniencia de, tener en cuenta, a la hora de redactar los presupuestos, los ingresos necesarios para no tener que acometer gastos que carecieran de esa consignación presupuestaria. Una garantía de la que los funcionarios de todas las administraciones, y en particular de la valenciana, quieren disponer para evitar eventuales denuncias en los juzgados precisamente por acometer gastos fuera del presupuesto. Una práctica -las famosas facturas en los cajones- a las que el actual Consell ha puesto punto y final, pero por las que Bruselas mantiene abierta una investigación sobre la contabilidad del déficit de la administración autonómica.

La tesis de la conselleria de Sanidad contrasta con la de Hacienda. El equipo que dirige Moragues entiende que en los presupuestos no se puede incorporar una previsión de ingresos -los que podrían llegar en el caso de que el Gobierno apruebe nuevos mecanismos para dar liquidez a las autonomías- sin disponer todavía de las garantías de que así vaya a ocurrir.

La discusión, tildada en ámbitos cercanos al Palau de discrepancia en la técnica presupuestaria, habría ido a más, según otras fuentes. Llombart -uno de los consellers más cercanos a Fabra- habría planteado incluso que esta situación podría llevar a obligarle incluso a cerrar hospitales. El presidente de la Generalitat, se asegura, habría intentado mediar ante Moragues para que accediera a las peticiones del conseller de Sanidad, aunque Moragues se habría negado a introducir cambios en el proyecto de ley.

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