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La doble puerta trasera permite cargar todo tipo de bultos con facilidad.
Aliado en el día a día urbano

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Una semana conduciendo sin parar el eNV-200 nos desvela muchas de sus virtudes más escondidas

A. ADALID

Sábado, 18 de abril 2015, 00:20

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Tanto con los coches eléctricos como con los híbridos enchufables de estos #12MesesEléctricos tenemos la misma sensación: cuanto más los conducimos, más cosas descubrimos y más nos gustan. Este es el caso de la Nissan eNV-200. Esta semana ha estado casi todos los días en nuestras manos, por lo que tenemos mucho que contar.

Fácil recarga

Lo primero es que la batería del eNV-200 hay que cargarla por completo, por la noche y en casa, ya que, al menos con la potencia de carga convencional, que puede ocupar unas 9 horas desde la descarga total al 'lleno'. Algunos días íbamos a media carga y en pocos 'recados' estábamos cerca de los 20 ó 25 kilómetros de autonomía, quizá muy pocos para ir tranquilos. La ventaja es que este coche no sólo marca la 'reserva' sino que la 'canta' y del equipo de audio aparece una voz advirtiendo 'autonomía limitada' por lo que será difícil que alguien se quede sin batería.

Mejor en modo 'Eco'

Tras cargarlo por completo hemos realizado una conducción muy suave, en modo Eco, que es como hay que ir con este tipo de coche, y siempre con unos 80 kilogramos extra en la caja trasera. En este furgón, tanto con carga como sin ella, las suspensiones son tan suaves como en un turismo, y esto es gracias al peso de las baterías y las buenas suspensiones independientes. Es refinado y suave, tanto como un turismo.

Buen puesto de mando

El puesto de mando no es de un turismo. Es mejor. La caja automática lo hace muy cómodo, y el cambio tiene dos posiciones para poder recargar más batería cuando deceleramos. Usándolo hemos pasado días enteros sin usar apenas los frenos, anticipándonos al tráfico y, por tanto, ahorrando batería. Pero volvamos al cuadro de mandos. La pantalla táctil, la misma del turismo Nissan Leaf, tiene un completo ordenador que nos permite programar la carga, la refrigeración o calefacción del coche y también conectarnos a la red Nissan por medio del Smartphone para acceder a información actualiza de puntos de carga. El ordenador de abordo nos indica cuanta electricidad gasta el motor, cuanta el climatizador y cuanta accesorios como la radio o los elevalunas, una información interesante que también nos ayuda a ampliar la autonomía entre recargas.

Muy fácil uso

El cuadro de mandos es perfecto, con un gran gráfico para la velocidad y una columna que mide la potencia consumida de fácil comprensión.

Si en modo normal da gusto acelerar y ver la cara que ponen el resto de conductores ante la celeridad de este NV-200, es el modo ECO el más satisfactorio, ya que disfrutamos yendo a punta de gas pero dentro del tráfico fluido gastando muy poca batería y alargando los 'repostajes'. De un modo al otro hemos medido 25 km. más de autonomía, mucho.

Como furgón, la zona de carga merece un diez. Dos puertas correderas y doble puerta trasera dan paso a un espacio forrado y con muchos ganchos para sujetar la carga, ya que si no van dando tumbos.

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