Calidad suprema

La Clase S es el coche imperial de Mercedes, aquél en el que vuelca todo su saber hacer, en el que presenta la mayoría de las innovaciones que llegarán a otros modelos de la marca -y a otras marcas, como ocurrió con el airbag o el ABS- , y el que muestra una calidad más alta. Diríamos que es el mejor coche del mundo, pero como tiene una cualificada competencia, diremos que es la berlina de Mercedes que reúne un mayor número de innovaciones.

Línea rompedora

La primera de ellas es el diseño, y es que si la generación anterior ya tenía una línea atractiva, ésta nueva Clase S resulta claramente moderna, modelada tanto en el túnel de viento para reducir las emisiones como en los ensayos con clientes que determinan detalles como una parrilla más grande, mantener la estrella sobre el capó o mostrar unas dimensiones relativamente compactas para un alto de gama. El diseño gusta, y en esta unidad, con kit deportivo y unas bonitas llantas que muestran discos de freno perforados, todavía más.

Innovación interior

Por dentro el impacto es aún mayor, porque Mercedes ha sabido dar a la vez un toque de clasicismo y tecnología en los mandos que rodean al conductor. El volante, por ejemplo, sólo tiene dos radios, se inspira en los Mercedes clásicos y está firmado en su parte inferior. Compuesto con una combinación de cuero, madera y aluminio, tenerlo en las manos es un placer en sí mismo. Detrás de él aparece una pantalla digital con toda la información. Su presencia simula los relojes habituales, pero el conductor recibe todo tipo de información configurable. Más grande todavía es la pantalla central, que muestra tanto los mapas del GPS como la radio, teléfono y el resto de funciones, que se pueden elegir desde el mando central. Se agradecen las tipografías grandes, más aún si tenemos en cuenta que el comprador habitual de esta berlina no es un cliente joven.

Nuestra unidad, cedida por el concesionario Mercedes Benz Valencia, cuenta con un interior de cuero en color marrón realmente acertado.

Mecánica refinada

En lo técnico, el motor V6 CDI de tres litros de cilindrada evoluciona para dar prestaciones con bajos consumos -5,5 litros en homologación-. Se une al cambio de siete marchas y a la suspensión neumática opcional 'Airmatic' que permite varios tipos de dureza con diferencias sensibles entre ellos.

En marcha el modo confort es como una alfombra mágica que nos desplaza por encima de los baches sin apenas notarlos, en el sport se endurece y la dirección responde con mayor rapidez, de modo que el coche es más ágil y dinámico. La visibilidad del contorno es perfecta, ayudados en las maniobras por las multi-cámaras y, en marcha, por los retrovisores que nos señalan si hay un coche en el ángulo muerto.

Máxima seguridad

Precisamente la tecnología de seguridad es espectacular, ya que el radar de proximidad no sólo avisa de la presencia de un coche delante nuestro, sino que puede activar los frenos si calcula que, por su velocidad y la nuestra, podemos chocar. También nos gusta el sistema de mantenimiento de carril, ya que, si percibe mediante la cámara frontal que el coche sale ligeramente del carril por el que circulamos, y por tanto corremos el riesgo de salir de la carretera, aplica los frenos, corrige la dirección y hace vibrar el volante suavemente para devolver el coche al carril. No son pocos los casos en los que un conductor se queda dormido, y este sistema minimiza los riesgos.

Dentro del equipamiento, los asientos con masaje o la climatización a la carta son dos detalles, aunque podemos añadir muchos más, con una extensa lista de opciones que satisfacen hasta a los clientes más caprichosos. El espacio interior es abundante, como es lógico dado su tamaño.

Consumos ajustados

En cuanto al motor, es tan bueno y discreto que hay poco que comentar. Suave y ahorrador cuando conducimos de forma tranquila, es capaz de despertar si pisamos a fondo el acelerador para convertir los viajes en veloces desplazamientos, y todo con un consumo promedio muy bajo gracias al sistema de parada y arranque automáticos o la buena aerodinámica.

Desde 90.000 euros

El precio del buque insignia de Mercedes es de más de 90.000 euros, que aumentan en unos 15.000 euros con las opciones instaladas en nuestra unidad. A cambio, obtenemos una de las berlinas más completas del mundo, líder en tecnología, empaque, imagen y confort.