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GUILLERMO ELEJABEITIA
Martes, 5 de septiembre 2017, 00:07
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La consorte de quien está llamado a ser rey puede visitar instalaciones públicas, asistir a eventos sociales o apoyar causas benéficas, pero su principal labor en el arcaico engranaje de las monarquías sigue siendo proporcionar vástagos a la estirpe real. Ayer la duquesa de Cambridge debía visitar un centro de entretenimiento infantil en el barrio londinense de Holloway, pero a primera hora de la mañana tuvo que cancelar su compromiso. Está cumpliendo con un deber mayor.
Según informó el Palacio de Kensington en un escueto comunicado, Catalina está de nuevo embarazada. «La Reina y los miembros de ambas familias están encantados con la noticia», especifica la nota. No tanto la esposa del príncipe Guillermo, quien en esos momentos era presa de las náuseas. Como en sus dos gestaciones anteriores, Middleton sufre de hiperemesis gravídica, una dolencia que afecta a uno de cada 200 embarazos y que se manifiesta en forma de fuertes arcadas, vómitos y aversión a la comida, además de fatiga, mareos y confusión. Las afectadas corren riesgo de deshidratación y pueden perder hasta un 10% de su masa corporal, por lo que se les prescribe reposo y comidas frecuentes pero frugales. Sólo en casos severos se recomienda su ingreso hospitalario.
De momento, la duquesa está siendo tratada en su residencia oficial y se ha despejado su agenda para las próximas semanas con el fin de que pueda centrarse en llevar a buen puerto la gestación de un nuevo Windsor. Mientras tanto, su marido, que ayer por la tarde visitó el centro infantil en el que se esperaba a ambos, seguirá cumpliendo con sus compromisos oficiales.
Los duques están cumpliendo con sus deberes dinásticos con puntualidad británica. El anuncio de que su tercer vástago está en camino se produce el mismo día que Jorge, de 4 años y heredero al trono, asiste a su primer día de colegio. También a comienzos de septiembre, pero de hace tres años, se anunció oficialmente el segundo embarazo de la duquesa, por lo que cabe esperar que el bebé nazca en primavera, como lo hizo su hermana Carlota.
El nacimiento no alterará el orden de sucesión en casa de los Cambridge, ya que el Reino Unido eliminó la prevalencia del varón sobre la mujer en el derecho sucesorio poco antes de que naciera el príncipe Jorge. Sea niño o niña, ocupará el quinto puesto, por detrás de la princesa Carlota. Evidentemente, sí desplazará a todos los que se encuentran por detrás, empezando por su tío Enrique, a quien deja fuera del 'top 5'.
Nada hacía presagiar el feliz anuncio durante la última aparición pública de Catalina, el pasado miércoles en el homenaje a Diana de Gales con motivo del vigésimo aniversario de su muerte. Para asistir al acto -la inauguración de una pequeña reforma en el rincón favorito de la princesa en los jardines de Kensington- la duquesa volvió a mimetizarse con su suegra al elegir un vestido estampado de Prada, muy similar a uno que llevó Lady Di en 1981. No es la primera vez que se inspira en su memoria. Al presentar a Jorge y Carlota vistió como lo había hecho ella cuando nacieron Guillermo y Enrique. Para el tercero tendrá que innovar.
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