Carmen quiere ser Grande de España

El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó ayer una resolución, firmada por Nicolás Cabezudo (director de la División de Derechos de Gracia y otros Derechos del Ministerio de Justicia), donde deja constancia de la petición y en la que subraya que, a partir de la publicación del edicto, cualquier interesado puede presentar en 30 días las alegaciones que considere oportunas en caso de querer disputar el título a «doña María del Carmen Martínez-Bordiú Franco».

Las reacciones no se hicieron esperar. La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) se ha levantado contra la iniciativa y ayer mismo presentó en el registro de la Fiscalía General del Estado una denuncia al entender que se trata de un «premio» a quienes protagonizaron un golpe contra la democracia y constituye un agravio a las víctimas del franquismo. «No tiene ningún sentido continuar con este reconocimiento 43 años después de su creación. Un Estado de Derecho debe amparar a las víctimas, no hacer nunca apología de la dictadura», afirmó Bonifacio Sánchez, representante del colectivo.

En el escrito, firmado por el presidente de la ARMH, Emilio Silva, se pide a la Fiscalía que tome medidas para proteger los derechos de las víctimas. Advierte además de que la colaboración de las instituciones del Estado con el proceso por el que los descendientes de Franco «tratan de constituir una dinastía nobiliaria» puede ser constitutiva de delito, al apreciar «un acto de enaltecimiento de la dictadura y la violencia política».

La ofensiva contra la 'nietísima' no acaba ahí. Desde Izquierda Unida han puesto en marcha su maquinaria para acabar con el Ducado de Franco. La federación de izquierdas se dirigirá tanto al rey Felipe VI como al Ministerio de Justicia para acabar con este título, «que contraviene la Ley de Memoria Histórica de 2007». Así lo avanzó el diputado Ricardo Sixto, quien el pasado mes de febrero ya registró una proposición no de ley en el Congreso de los Diputados para tratar de frenar la sucesión del ducado, vacante desde el fallecimiento de Carmen Franco, en diciembre del año pasado, y promover su definitiva eliminación.

La Ley de Igualdad para la Sucesión de Títulos Nobiliarios acabó en 2006 con la prevalencia del varón y Carmen Martínez-Bordiú, la mayor de los hermanos (tiene 66 años), es hoy la heredera legal del ducado. También lo es del señorío de Meirás, aunque todo apunta a que seguirá en manos de su hermano Francisco, como desde hace 30 años.