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El presidente de CEC, José Roca, y el secretario general de la organización, Rafael Montero. :: manuel molines
José Roca resiste al frente de la patronal de Castellón y plantea rejuvenecer el equipo

José Roca resiste al frente de la patronal de Castellón y plantea rejuvenecer el equipo

El dirigente empresarial achaca las críticas a su gestión por parte del sector azulejero a motivos personales de sus representantes

Á. MOHORTE

Viernes, 27 de mayo 2016, 19:41

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El presidente de la Confederación Empresarial Castellonense (CEC), José Roca, se mantendrá al frente de la patronal. Pese a los rumores de dimisión y la salida de uno de sus vicepresidentes por discrepancias sobre la gestión de los últimos años, el veterano líder patronal ha superado la situación, aunque sea por el momento.

La larga reunión de la junta directiva de la confederación celebrada el jueves en Castellón vino marcada por los momentos de tensión y las exigencias de explicaciones sobre el estado de las cuentas por parte de los asistentes, encabezados por el ya exvicepresidente Miguel González, representante de la Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos (Ascer), el sector más potente de la provincia.

En declaraciones a LAS PROVINCIAS, José Roca ha asegurado que se trató de «una reunión normal, con una participación muy activa», aunque distintas fuentes señalaban la pasada jornada como la última del actual presidente, pese a haber sido reelegido hace un año por sexta vez.

Muy al contrario, Roca niega que nadie pidiera el jueves su dimisión ni que los tres vicepresidentes que mantienen los cargos amagaran con hacerlo si él no lo hacía. En todo caso, reconoce que no sabe si terminará su mandato (que expira en 2019) ya que asegura que, desde que asumió la presidencia en 1987, no piensa continuar si no dispone del respaldo de la organización.

Respecto a las críticas de los representantes del sector cerámico , el presidente de CEC atribuye la situación a motivos personales de González y del grupo al que representa. «No se puede acusar aquí de falta de transparencia, que ya hay hasta demasiada», asegura. En todo caso, el patrono reconoce que económicamente la organización «funciona con dificultad», aunque entiende que se va por el buen camino y en breve estará finalizado el plan de viabilidad que debería devolver a la CEC al equilibrio financiero.

En todo caso, ha abierto la puerta al rejuvenecimiento de la dirección, recurriendo al consejo asesor de jóvenes empresarios, «que lo hemos tenido muy parado desde el inicio de la crisis», según Roca. Respecto a las acciones judiciales que investigan prácticas irregulares en la gestión de los fondos de formación por parte de la organización durante la gestión de Roca, el empresario considera que «se han hecho bien las cosas» y que, a pesar de que la justicia es lenta, «todo se terminará por esclarecer».

En concreto, la causa abierta en el juzgado de instrucción número 1 de Nules investiga un presunto fraude en los fondos de formación por de 419.000 euros, que ha llevado a declarar como imputados, entre otros, a José Roca y a su secretario general, Rafael Montero, que en la época investigada lo era también de la autonómica Cierval.

Sin embargo, otras fuentes aseguran que la falta de acuerdo para plantear un sustituto de consenso ha aplazado una renovación que se prevé inevitable y que distintos miembros de la junta directiva califican de urgente, especialmente en un momento en el que está en cuestión la continuidad de esta patronal, lo mismo que la alicantina Coepa, ya en concurso de acreedores.

La razón de que el futuro esté llene de incertidumbres se debe a la negociación en Valencia de la reordenación de la estructura patronal valenciana. Hoy existe una patronal autonómica, Cierval, que sirve de nexo entre las tres provinciales y como interlocutor ante la Generalitat. Teniendo en cuenta la comprometida situación de CEC y Coepa, y la de Cierval por el impago de las cuotas por las dos anteriores, una de las alternativas que está cobrando fuerza es una reestructuración generalizada de la estructura que reforzara la autonómica y dejara en meras delegaciones las provinciales.

En este escenario sacaría partido la Confederación Empresarial valenciana (CEV), principalmente porque es la única que está actualmente saneada y tendría que pagar parte de los platos rotos en sus vecinas. De este modo se pasaría de un modelo similar al de la patronal vasca de la catalana, donde Foment del Treball (organización que presidió el actual presidente de CEOE, Juan Rosell) es el actor dominante.

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