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J. C. VILLENA
Lunes, 27 de marzo 2017, 23:55
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Afrontar la condición de favorito con naturalidad pero respetando al rival al máximo. Esa es la frase que se han tatuado en la mente los jugadores del Valencia Basket y su cuerpo técnico. Negar que los valencianos llegan con más crédito a la batalla final de la Eurocup, desde el factor pista de la inexpugnable Fonteta en cinco meses hasta el gran momento de forma del líder de la ACB, sería pedante. Hacerlo mirando por encima del hombro, suicida. En el término medio está la virtud que ayer expresó Pedro Martínez tras el último entrenamiento oficial: «Hay aspectos que no podemos obviar y que estamos encantados de que sean así, tenemos un mejor ranking en la competición que ellos y vamos en la ACB mejor. Desde ese punto de vista podemos ser favoritos pero el respeto que tenemos por Unicaja es muy grande. ¿Favoritos? Sí. Decimos con naturalidad y sin miedo que en el deporte de elite hay posibilidades de ganar y de perder».
La mejor forma de afrontar una final con un formato extraño, a tres partidos, es no variar ningún hábito. El buen humor que presidió ayer la sesión en la Fonteta es el mismo del día a día del vestuario. Ningún cambio pomposo por una final que el técnico taronja reconoció que reciben «con mucha ilusión» desde que iniciaron el largo camino hasta la serie decisiva, desde el respeto al Unicaja: «Hay disfrutar la parte que tiene de disfrute y el sufrimiento de jugar una final europea contra un excelente equipo. Hay que tener la suficiente sangre fría. Te tienes que intentar aislar de todo lo que rodea una final y centrarnos en el partido. Nos conocemos bien y eso tiene una parte positiva que es el respeto que les tenemos. Tenemos que estar muy concentrados». Martínez deslizó que hoy el Unicaja ofrecerá variantes «porque sabemos que tienen sistemas defensivos que no utilizaron el otro día. Van a hacer cosas diferentes, no se van a dosificar».
Joan Plaza, después de observar la naturalidad del saludo entre Carlos Suárez y Rafa Martínez, también se mostró sincero: «Sabemos que en la Fonteta no gana nadie desde octubre y que las apuestas están en contra. Cuando pierdes cuatro veces está claro que eres peor equipo. Ves un muro muy alto que puede parecer imposible de saltar y sabes que para romper un muro hay que hacer sangre». Por cierto, la plantilla taronja recibió con sorpresa el MVP de la Eurocup para Shved en detrimento de Dubljevic.
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