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Hamilton en el partido de la semana pasada ante el Limoges en la Fonteta.
El Valencia Basket quiere la revancha
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El Valencia Basket quiere la revancha

La expedición recibe con sorpresa la decisión del conjunto catalán y se blinda de cara a preparar el decisivo partido de Eurocup en Limoges

Juan Carlos Villena

Martes, 26 de enero 2016, 00:16

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«Tenemos ganas de revancha». La frase de Guillem Vives en el vestuario del Palau a LAS PROVINCIAS se convirtió en el mejor titular para la previa del partido que enfrenta hoy a los valencianos en Limoges al conjunto francés. La última jornada de la Eurocup acabó con el regusto amargo que dejó la primera derrota de la temporada. Más por la forma que por el fondo, puesto que la plantilla tenía claro que antes o después llegaría el momento en el que se perdería la imbatibilidad. El 72-92 escoció mucho en el vestuario, puesto que se trató de la derrota más amplia en la historia del Valencia Basket en Europa. La expedición llegó ayer a Limoges con la única misión de vengar deportivamente esa afrenta y sin que nadie, ni nada, distraiga a los jugadores del importantísimo partido de esta tarde en el Beaublanc, ni el sorteo de la Copa del Rey ni la decisión del Barcelona que conoció el equipo nada más aterrizar en tierras francesas.

El Barça ha decidido solicitar a la ACB las imágenes que utilizaron los árbitros del partido del domingo en el Palau para decidir si impugnan o no la victoria taronja, en función de lo claro que quede en esas imágenes si Doellman está pisando o no la linea de tres en la falta de Sikma en los últimos segundos del final de la prórroga con 89-93 en el marcador. Conde, el árbitro principal, concedió la canasta más adicional pero de dos y no de tres tras visionar el 'instant replay'. El portavoz del conjunto catalán, Josep Vives, comunicó ayer que el club se amparará a un artículo de la aplicación de la norma que dice que una decisión no podrá ser cambiada si la imagen no es clara.

El Valencia Basket apeló ayer a la prudencia, tal y como confirmaron fuentes oficiales del club en Francia a este periódico. La entidad valenciana está muy tranquila al respecto, remitiéndose a la decisión de los colegiados tras el visionado de la imágenes y al dato decisivo de que el Barça no firmó el acta bajo protesta. En las oficinas de la Fonteta consideran que el Juez Único no rearbitrará el partido, y más teniendo en cuenta el precedente del famoso 'caso Slaughter'. Si en aquella ocasión no se rearbitró un acta modificada al descanso y una alineación indebida con la firma del entrenador del Real Madrid, nadie se puede creer que exista ahora recorrido. En el caso de que ocurriese, el Valencia Basket no se quedará quieto. Por cierto, con un triple el resultado hubiera sido 92-93, tiro libre y posesión taronja.

Pedro Martínez no quiere ni que le hablen del asunto, puesto que su única obsesión es que sus jugadores estén centrados en el importante partido de esta tarde en Limoges. Las cábalas del Grupo I son claras ya que los cuatro equipos suman al menos una victoria. El conjunto que llegue a cuatro tendrá asegurado matemáticamente su pase a octavos. El Valencia Basket afronta la cuarta jornada con dos triunfos, con lo que en el caso de no ganar en Francia aún dependerá de sí mismo para pasar. El dato es importante pero no desvía el deseo de demostrar en tierras francesas que lo del martes fue un mero accidente. Lo que más preocupa en el cuerpo técnico es el desgaste del brutal partido de Barcelona. Van Rossom sigue siendo la única baja del equipo para un partido donde, a buen seguro, los taronja van a igualar el duelo físico.

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