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Juan Carlos Villena
Lunes, 29 de junio 2015, 00:09
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Sam Van Rossom va a ser la perla en el mercado de verano de la ACB, y más teniendo en cuenta que Real Madrid y FC Barcelona son los dos equipos que tienen en la agenda al base. De momento ninguno de los dos equipos han dado un paso por el belga, la temporada para ellos acabó hace muy pocos días y aún no han comenzado los movimientos de fichajes, pero el base ha subido enteros en las listas que manejan las dos direcciones deportivas. Tal y como informó este periódico el pasado 18 de mayo, en las reuniones de trabajo que se produjeron en la Final Four de la Euroliga el nombre de Van Rossom se puso encima de la mesa. Más de un mes después, los condicionantes en el puesto de base de los dos finalistas de la Liga Endesa que podían propiciar una oferta por Van Rosson son aún más evidentes.
El Real Madrid tiene en su agenda al base en el caso de que haya una salida a la NBA por parte de alguno de los 'Sergios'. Los Rockets tuvieron en el playoff a Prigioni como mejor embajador para convencer a Llull. El argentino viajó a Valencia para presenciar los dos partidos de la serie disputados en la Fonteta, antes de que el menorquín acabara como MVP de las finales. Cuando Llull renovó su contrato hasta 2018 con el Real Madrid, se escribió una cláusula de salida NBA ya que el club blanco era consciente de que Houston compró los derechos del base por dos millones de dólares en 2012. «No tengo ningunda decisión tomada», esa fue su frase el día de la celebración del título de la ACB. Sergio Rodríguez también sondea el mercado NBA, puesto que aún tiene la espina clavada de su etapa en los Blazers. El otro equipo interesado en el jugador del Valencia Basket es el Barça, donde Huertas tiene los días contados y más tras su mal rendimiento en el playoff. Joan Creus tiene en su lista de recambios al belga en los primeros puestos.
¿Y qué opina de todo esto Van Rossom? El belga atendió a LAS PROVINCIAS antes de marcharse de vacaciones y se mostró muy claro: «Siempre he sido muy honesto, en el deporte siempre puede ser que te vayas de un club o que el club te despide. Cien por cien seguro nunca estás, lo único que se es que tengo dos años de contrato y que estoy muy a gusto y feliz en el Valencia Basket. No estoy buscando irme pero si viene una opción que es difícil rechazar podría pensarlo. Creo que es lo normal y algo que pasa en el mundo del deporte». Es decir, el belga confirma que a día de hoy no tiene ninguna oferta encima de la mesa pero que si llega la estudiará. Lo que tiene claro el Valencia Basket, que renovó su contrato hasta 2017 cuando el CSKA intentó ficharlo, es que no negociará ningún céntimo de una cláusula de salida de menos de un millón de euros y que no es prohibitiva para dos equipos de Euroliga como son el Real Madrid y el Barça.
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