Borrar
Urgente Lluvia de premios con la Primitiva del jueves que entrega un premio de 46.550 euros en una administración de Valencia

Federer y Nadal, un duelo eterno

El balear debió remontar durante todo el partido y tuvo su oportunidad en la última manga, aunque Federer se rehizo para ganar

MANUEL SÁNCHEZ

Domingo, 29 de enero 2017, 23:49

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La historia es Roger Federer, Roger Federer es historia y el tenis se hizo para que este genio lo jugara. El suizo venció en la final del Open de Australia a Rafa Nadal, en una reedición de los viejos duelos de antaño. Federer se anotó el partido y el título por 6-4, 3-6, 6-1, 3-6 y 6-3, y firmó una de las mayores gestas de la historia de este deporte al conseguir su decimoctavo 'major' a sus 35 años y medio. Enfrente la imagen de la derrota y la injusticia, porque en una final entre estos dos caballeros ninguno merece perder nunca. Esta vez le tocó a Rafa Nadal hincar la rodilla ante un Federer que inclinó la final hacia el lado que quiso, el de la rapidez y los puntos cortos. Tanto fue así que pese a irse el partido hasta los cinco sets, duró menos de cuatro horas.

Federer supo cómo jugarle a Nadal en todo momento y no dejó que el balear se aprovechase de las debilidades del revés del suizo. Rafa siempre ha cimentado sus victorias ante el helvético en bolas altas y liftadas al revés a una mano. Sin embargo, Roger encontró la solución. Durante todo el partido jugó sobre la línea de fondo y golpeó la bola cuando subía, sin dejar que cogiese la altura necesaria para incomodarlo. Con ese golpe de efecto, Federer se anotó sin piedad una pieza clave del partido, el primer set, el más duro escollo en un partido tan largo, y comenzó con la victoria mental desde el principio.

Con el primer set en el bolsillo Rafa no iba a rendirse y empezó el segundo parcial con cuatro juegos seguidos que le valieron para alcanzar la igualdad en el marcador al poner el 1-1. Ahí apareció el mejor Federer, el verdadero expreso suizo que aniquiló al balear con 18 golpes ganadores en esa manga. Prácticamente la mitad de los puntos que ganó en el tercer set fueron ganadores. 6-1 para Roger y el cuerpo pidió un quinto set. Rafa lo concedió al evitar los arreones del suizo y conseguir un 'break' en el cuarto juego. Aguantó el saque hasta el final y forzó la quinta manga, donde comenzó con una rotura arriba, lo que auguró una temprana victoria.

Pero Federer es mucho Federer, y cual ave fénix, a sus 35 años devolvió la rotura a Rafa, le rompió una vez más el servicio al balear y cerró el partido, tras salvar un 15-40. Juego, set, partido, título y gloria para el mejor tenista de todos los tiempos. Las lágrimas del suizo al caer al suelo de la Rod Laver Arena tras conquistar Melbourne contrastaron con las mismas lágrimas que derramó en ese mismo escenario al caer derrotado en 2009.

Con este Abierto de Australia, Federer ya suma 18 'Grand Slam', más que nadie en toda la historia, le saca cuatro a Pete Sampras y Rafa Nadal y seis al serbio Novak Djokovic, por lo que su reinado parece imposible de superar.

Al otro lado queda Rafa Nadal, que cayó con honores en cinco sets, en un partido que nadie creyó que podría disputar y en el que luchó hasta el último instante. Gloria también para él, que demostró que puede competir contra los más grandes y al que seguro que el tenis le da una segunda oportunidad de conseguir su decimoquinto 'grande' en los próximos meses.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios