Borrar
Aficionados moteros, durante la tarde de ayer en Cheste. :: jesús signes
Cheste recibe a los moteros

Cheste recibe a los moteros

Los aficionados ya toman las calles aunque la mayoría llegarán en la jornada de hoy

LOURDES MARTÍ

Viernes, 7 de noviembre 2014, 23:53

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

En la calle de la Ermita de Cheste, cuatro vecinas sacan sus sillas a la puerta de casa. Desde allí disfrutan del olor a goma quemada y el rugir de los motores: «Para ser viernes y por la tarde hay mucha gente», comentan. Otra mujer pasa por allí y se une al grupo: «Carmen, siéntate con nosotras». Rondan los 60 años pero lejos de sentirse molestas por el ambiente que cada año se vive en el municipio con motivo del Gran Premio.

Tienen unas vistas privilegiadas, ya que residen al lado de la plaza del Ayuntamiento. Allí la mayoría lleva como uniforme oficial el mono de motero que con el casco en el codo forma el atuendo oficial del fin de semana. Mientras unos disfrutan de la música, otros se lo toman con calma. Dentro de uno de los locales, cuatro moteros disfrutan jugando al mus. José, Miguel, Esteban e Israel son de Madrid y desde hace 15 años no faltan a la cita valenciana: «Hemos ido alguna vez a Jerez pero lo que se vive aquí nos enganchó desde el primer día. No nos pilla muy lejos y hay un ambiente espectacular». Aunque disfrutan de la marcha de Cheste, sólo han pernoctado en la misma localidad durante los tres primeros grandes premios. Ahora, se marchan un poco más lejos: «Tenemos la casa alquilada en Yátova».

No será por falta de oferta en el propio municipio. Ni por las facilidades. Hasta el Ayuntamiento en su página web hace públicas las casas, pisos o habitaciones que los vecinos de Cheste alquilan para la cita motera. Sergio Palau es de Valencia y él tampoco falla ningún año: «Me gusta venir al pueblo. Vamos con los amigos por los bares y hay un ambiente muy bueno, pero sólo lo hacemos el viernes previo al gran premio ya que nos gusta disfrutar de las carreras y el cuerpo ya no aguanta tanto como antes».

Pero el disfrute de unos no sería posible sin el trabajo de otros. Este año se han intensificado los controles de alcoholemia y de drogas para evitar accidentes que empañen la fiesta. De hecho, por la A-3 en dirección a Valencia los agentes se dejan ver. Muchos se quedan a dormir en otras localidades cercanas a Cheste como Godelleta. «Es el segundo año que venimos y nos hemos quedado allí siempre por recomendación de unos amigos», comenta Lucía Freitas, de Pontevedra: «Hemos llegado esta mañana en avión y hemos alquilado un coche para movernos».

Tanto ella como sus amigos son asiduos a los GP. «Solemos ir a Estoril y también a Aragón», afirma esta aficionada, quien destaca la organización de la cita valenciana: «Nos agradó mucho, la zona del parking y de acampada están muy bien». Estas son algunas de las razones por las que no le importe que el campeón de Moto GP ya esté decidido: «Disfrutamos igual, no pasa nada».

Aunque ayer ya había gentío en Cheste, hoy se espera el desembarco de la mayoría de aficionados a las motos, que un año más llegarán hasta los 200.000.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios