Borrar
Urgente Muere el mecenas Castellano Comenge
Paula Gimeno, en el campo de hockey de Tarongers. matías sartori/fhcv
Paula Gimeno: «El ascenso es el premio a seis años muy duros»

Paula Gimeno: «El ascenso es el premio a seis años muy duros»

La directora deportiva del Valencia femenino también entrena a hombres: «He estado muy a gusto con ellos»

ALBERTO MARTÍNEZ * alberto.martinez@lasprovincias.es

Domingo, 27 de mayo 2018

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Paula Gimeno lleva la bandera del hockey femenino en la capital del Turia. Hace seis años emprendió un ilusionante proyecto en el Valencia CH. Aterrizó en el club con la misión de crear una sección de mujeres. Desde cero. La idea le apasionó. Empezó a construir una estructura captando a niñas y, hace una semana, alcanzó su gran objetivo gracias al ascenso del equipo sénior a Primera División. Esta profesora de Educación Física, de 34 primaveras, tiene diversas facetas: jugadora, entrenadora y directora deportiva. Le sobra iniciativa. De ahí que también brille liderando a conjuntos masculinos.

-Ha sido una temporada memorable, pero la ha vivido lesionada.

-Todo esto comenzó con seis niñas y, desde ahí, hemos empezado a tener equipos. Hemos trabajado sobre todo la base. Mi objetivo era que el Valencia subiera a Primera y, justo al año que ascendemos, me lesiono y no puedo jugar. Me rompieron el ligamento cruzado de la rodilla, pero desde fuera también lo he vivido con mucha emoción. El traumatólogo me ha dicho que estaré para la próxima temporada.

-¿Usted es la impulsora?

-Sí. Yo y mi hermana Ana, que vino a ayudarme y empezamos a sacar niñas en escuelas y a hacer promoción. Cuando las entrenadoras son chicas, te ven como un referente y se apuntan.

-¿Cuándo comenzó todo?

-Yo he estado en otros clubes. Jugué en el Xaloc diez años en Primera. El Valencia me llamó hace seis años y me preguntó si quería empezar con la línea femenina en su club porque no tenían. Siempre habían tenido chicos.

-¿Qué cargo asumió?

-Primero era entrenadora, luego me hicieron coordinadora de la línea femenina y el año pasado empecé a ser la directora deportiva.

-¿Qué supone este ascenso?

-Es el premio a seis años de trabajo muy duros, de estar día a día con las niñas. Es un sueño. Esto lo hemos sacado entre mi hermana y yo y ver que ahora hay dos equipos sénior en el club y uno de ellos ha subido a Primera es inexplicable.

-¿El primer equipo está basado en las niñas que captó en su día?

-Las jugadoras del primer equipo son de la cantera menos una holandesa y alguna argentina que vive en Valencia. Subir ha sido un punto a favor. Hay clubes de fuera de la Comunitat que empiezan a llamar a las juveniles que ya están yendo a la selección. Deben seguir una progresión y, si aquí no tenemos equipos en Primera, al final se tienen que ir. Como le pasó a mi prima Amparo Gil y a Lola Riera.

-¿Cuáles son las expectativas en Primera, que es la segunda categoría nacional, por debajo de División de Honor?

-En la fase de ascenso, en principio íbamos sólo a jugar, pero vimos que teníamos opciones y empezamos a creérnoslo. Pues ahora, igual en Primera. Intentaremos mantenernos, pero si vemos que podemos llegar a mitad de tabla, haremos lo máximo.

-¿En la fase de ascenso dieron la campanada?

-El Xaloc era favorito para subir. Ellas quedaron primeras en la liga territorial y nosotras, segundas. Lo lógico era que subieran, pero tuvieron mala suerte. Hubiese sido muy bonito que los dos equipos estuviésemos en Primera, porque había tres plazas y podía darse.

-No había ningún equipo de la Comunitat en Primera ni en División de Honor. ¿A qué se debe?

-Estamos mejor que hace diez años. Ahora hay bastantes niñas en Valencia. Seguro que podría ir mejor, pero estamos bastante limitados porque los campos son públicos y los cuatro clubes de aquí entrenamos en el mismo sitio: Valencia, Xaloc, Carpesa y Giner de los Ríos. Tenemos el espacio limitado. Si tuviéramos más campos, podríamos expandirnos mucho más. Competimos con deportes más fuertes.

-¿Jugó con Lola Riera?

-He jugado con Amparo, Lola, Bego... Cuando estábamos en el Xaloc, llegamos a jugar todas juntas. El año que viene nos enfrentaremos a mi prima Elisa Gil -hermana de Amparo-, que está en el filial del Club de Campo.

-Lola es la única representante de la Comunitat en la selección.

-Representa a la Comunitat, porque no tenemos a más. Tampoco en chicos. Ojalá hubiese aquí equipos que les pudiésemos ofrecer quedarse en División de Honor para que no tuviesen que irse a Madrid.

-¿Ese es su gran reto?

-Mi reto por ahora es mantenernos en Primera, que vaya creciendo el club y luego igual nos podemos plantear subir a División de Honor. Poco a poco.

-¿Cuántas chicas hay en el club?

-El benjamín y el alevín son mixtos. Desde infantil se separan. Este año hemos tenido dos equipos infantiles, dos cadetes, uno juvenil y dos séniors. De licencias femeninas, tenemos más de cien. He entrenado a casi todas las niñas que están jugando. Para mí es una ilusión muy grande jugar con las chicas a las que yo he entrenado y que muchas sean mejores que yo.

-¿Aún ejerce de entrenadora?

-Los dos últimos años he entrenado al segundo equipo de chicos y a los juveniles. De hecho, hace cuatro años subimos al senior masculino a División de Honor B, aunque no pudimos mantenernos.

-No es algo habitual.

-Es raro que una chica lleve equipos de chicos. Siempre me preguntan si me hacen caso y me respetan. Claro que me respetan. Siempre me han apoyado muchísimo. He estado muy a gusto con ellos y no tengo ningún problema, pero es otra forma de trabajar. Me cuesta más conectar con los chicos que con las chicas. Los entrenadores hombres dicen que les cuesta mucho con las mujeres y que hay muchos conflictos, pero a mí se me da mejor resolver los conflictos en chicas que en chicos. Cogí el masculino porque me parecía un reto y me gusta probar cosas nuevas. Pero creo que me gusta más el femenino.

-Es una las grandes líderes del hockey femenino en la Comunitat.

-Siempre he intentado sacar niñas. En mi época, no había casi niñas. Tenía que jugar con chicos y me quedaba sin competir algunos años. Yo quería que las niñas no se quedasen sin jugar a hockey.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios