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Pedro y Martín, dos de los regatistas, en la Marina Real Juan Carlos I. :: irene marsilla
Un centro de tecnificación a toda vela

Un centro de tecnificación a toda vela

La Federación crea dos bases, una en Valencia y otra en El Campello

LOURDES MARTÍ

Lunes, 13 de febrero 2017, 00:35

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Un día entre semana cualquiera, podría ser un martes. Pedro y Martín van a la Politécnica. El primero estudia Ingeniería Eléctrica y el segundo Ingeniería y A+D. Comen y, si el viento acompaña, ponen rumbo a la Marina Real Juan Carlos I. Allí se encuentra una de las dos bases del CETDV, centro de tecnificación de Vela de la Comunitat Valenciana. «Llevamos años trabajando con la base y queríamos hacer esfuerzos en la vela juvenil y sobre todo, también, para contrarrestar el abandono deportivo que suele haber en esas edades. Es ese plus, que aparte del fin de semana que pueden navegar, también entre semana», comenta José Liceras, director deportivo de la Federación.

«El año pasado fue un poco la versión cero, probamos. En este 2017 hemos arrancado con fuerza. Como la Comunitat es alargada, pensamos en crear dos bases en emplazamientos estratégicos. Ambos cerca de universidades y de fácil acceso tanto por carretera como por servicio público», añade Liceras. La otra se encuentra en el CN del Campello, Alicante. «Llega un momento en el que para que los deportistas mejoren se les debe exigir más, por ejemplo aquí en Valencia tenemos tres barcos de categoría 470, juntos aprenden más», explica el director deportivo de la Federación.

Pedro y Martín son de Altea y llevan cerca de siete años compitiendo juntos. Mano a mano. «Tener un centro así fuera de nuestro club que nos ofrece seguir entrenándonos al más alto nivel es impagable. Se preparan mejor las pretemporadas porque puedes trabajar todos los días que quieras. Si no existiera no podríamos compatibilizar los estudios con el deporte», comenta el primero. Hace poco que han estrenado clase, la 470, pero cada vez están más cómodos: «Primero vamos a pelear a nivel nacional, luego Europeos y Mundiales con el objetivo de los Juegos. o los de Tokyo o ya en 2024. quizás más lo segundo».

En Valencia cuentan con Roberto Tobar, el entrenador de agua. Pero este tipo de centros, en los que todo se mide al más mínimo detalle, cuentan con un apoyo multidisciplinar: «Contamos con una nutricionista, un fisio, otro compañero y yo que llevamos la preparación física y un psicólogo. En Alicante hay un convenio con un centro que cuenta con especialistas».

«Es un lujo entrenar aquí»

Paula Lissorgues se entrena en el Campello, el segundo centro de la Comunitat. En estos momentos, la regatista cursa segundo de Bachillerato. Se esfuerzo entre los libros con un fin muy claro: «Poder estudiar Ciencias de la Actividad Física y del Deporte». Además lo podrá hacer «en casa»: «Es un lujo poder continuar con la vela aquí. Si no, me habría marchado fuera para continuar mi carrera deportiva».

A los seis años, Paula tuvo su primer contacto con el mar y se enamoró tras vivir una sensación «inexplicable». Después de una trayectoria impecable en Láser 4.7, se embarcó en 2016 a la especialidad 470. Una clase olímpica que, pese a serlo, no le aparta de la filosofía que le ha acompañado a lo largo de su vida que es la de centrarse en el presente: «Todavía es pronto para hablar de Juegos Olímpicos, pero está claro que es a lo máximo que puede aspirar un deportista». Paula transita entre esa ambición constante y la calma con la que trabaja cada día, una paz necesaria para seguir avanzando en la vela.

La deportista profesa una gran admiración por Lucía Reyes. Su entrenadora en la base de El Campello, de la que aprende «constantemente» y con la que comparte horas de entrenamiento y agua. La regatista es la responsable de seleccionar a los mejores. La murciana aúna un palmarés envidiable: fue subcampeona del Mundo Láser Radial Juvenil en 2005, campeona de Europa de Match race en 2012 y llegó a ocupar el lugar número once en la fase Preolímpica de Londres. Dejó la vela de élite y ahora recorre la Comunitat Valenciana para transmitir a los más jóvenes su experiencia.

El sueño olímpico

«Ahora estoy centrada en ayudar a los chicos y chicas en dar ese paso a las clases olímpicas. La Federación tiene más control de ellos, de ayudarlos, fisioterapeuta, nutricionista, psicólogo, todas las áreas y es importante», explica Lucía Reyes. Roberto, la propia Lucía y los distintos alumnos del centro comparten el mismo sueño, que no es otro que competir en una gran cita y por supuesto nada como los Juegos.

Con sólo un año de existencia, el centro de tecnificación que pule a las perlas valencianas ha demostrado que era necesario. Se trata de un primer paso para hacer de la vela un deporte integrado totalmente en la ciudad, un objetivo que sin duda se lleva persiguiendo desde hace ya muchos años: «Vamos paso a paso, se habla de crear un centro náutico con varias federaciones y ojalá tengamos eso a largo plazo», puntualiza José Liceras.

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