Los escaleters, actores principales en el Circuit

valencia. El Circuit Professional ha completado el primer tercio de su fase regular y por el momento son los escaleters los pilotaris que más están dando que hablar, bien sea por su mayor regularidad o porque su rendimiento ha condicionado el desenlace de las partidas.

El pilotari que más elogios ha acaparado en este inicio es Soro III. El campeón individual y Salva forman la única pareja de la competición y esto obliga a ambos a multiplicarse en la cancha. El de Massamagrell está siendo una roca, una prolongación de la muralla, y gracias a la inestimable ayuda de su compañero y paisano ha ganado una partida y estuvo a punto de imponerse en la segunda: tuvo val para acabar.

También está generando admiración el joven Francés, que encandila al aficionado con su técnica depurada y dominio de la pelota. Las lesiones de habituales de la competición como Genovés II, Fageca o León han propiciado su debut y está respondiendo con creces. En su estreno su equipo cayó con estrépito; pero Francés firmó una meritoria actuación. En la segunda confrontación sí aparecieron Félix y Carlos para aportar quinzes y el chaval de nuevo se hizo fuerte en su parcela.

Otro que lleva dos actuaciones destacadas en otras tantas partidas es Pere Roc II, que lidera la tabla con pleno de victorias. Aunque en este caso los méritos están plenamente compartidos con Dani y Tomás II. El equipo de Benidorm es el que se está mostrando más sólido.

En el equipo de Pedreguer-masymas, Miguel y Víctor han sido los jugadores que han ocupado el resto y ambos han estado sobresalientes. El de Petrer es el titular y en la jornada inaugural del Circuit estuvo perfecto aunque su equipo cayó en el cara o cruz del iguales a 55 frente a Pere Roc II y los suyos. Víctor entró como sustituto el domingo en Bellreguard y el veterano de Pelayo deleitó con su maestría en los rebotes. Esta partida también se decidió por la mínima. En el juego definitivo Víctor consiguió tres quinzes dirigiendo la vaqueta desde el rebote. Con todo, es preciso destacar las dos actuaciones de Pere. El cañón que tiene por brazo derecho está siendo un problema para los rivales.

Quien ha dado la de cal y la de arena es Puchol II. El defensor del título firmó una actuación impecable en Guadassuar. Pero el sábado pasado no jugó lo que puede en Pelayo. En las dos partidas quedó claro que las opciones de su equipo pasan por sus manos ya que Héctor y Conillet se contagian de su rendimiento.

En cuanto al equipo de forman Santi, Javi y Monrabal, el único que aún no conoce la victoria, el escaleter de Silla está siendo el más regular. La responsabilidad de sumar corresponde a Javi y Monrabal. No en vano el de Massalfassar pelea con Félix por el título oficioso de mitger número uno y el punter es el considerado el mejor en su posición. Pero no han comenzado con el acierto que de ellos se espera. En la segunda partida sí hubo una evidente mejoría pero a Javi se le acabó la gasolina en el segundo tramo.

Tradicionalmente se ha considerado al escaleter o resto como la figura del trinquet por excelencia. De hecho, cuando menciona a los mejores de la historia, los nombres que aparecen son los del Nel de Murla, Quart, Juliet, El Rovellet, Eusebio y El Genovés. Más recientemente, Álvaro ha sido otro que ha marcado época, en su caso por su dominio en el individual, en el que acumula once entorchados. Antes que el de Faura, el mayor de los hermanos Sarasol, Enrique, también ostentó durante años la condición de número uno. Su reinado no se prolongó tanto en el tiempo pero el mismo Paco Cabanes le designó como su digno sucesor, lo cual ya es mérito suficiente como para ser destacado. En la actualidad también hay consenso en señalar a otro escaleter, Soro III, como el pelotari más decisivo.

Se podrían enumerar un buen número de mitgers que abrirían un debate sobre si fueron tan determinantes o incluso más que sus coetáneos en la ubicación del resto. Pero lo que es incuestionable, aún hoy, es que el que manda en el trinquet es el de atrás. Cuando el escaleter pide la pelota, los de delante deben encoger los brazos. Incluso hay trinquets, como Pelayo, en el que esta situación ya es una norma escrita.