Bartomeu, imputado por el 'caso Neymar'

El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz ha imputado al presidente del Fútbol Club Barcelona, Josep Maria Bartomeu, por un delito fiscal en ejercicio 2014 por el fichaje del futbolista brasileño Neymar da Silva Santos. El titular del Juzgado Central de Instrucción número cinco ha admitido la petición de la Fiscalía, que el lunes acusó a Bartomeu de defraudar supuestamente 2,8 millones al fisco y pidió abrir una pieza separada para investigar al dirigente culé y al Barça como persona jurídica.

El juez cita a Bartomeu para que comparezca en calidad de imputado, acompañado de abogado y con derecho a no decir verdad o no incriminarse, el viernes 13 de febrero. Para ese mismo día también declarará el representante legal del club.

El club asegura que la declaración complementaria presentada de forma cautelar y preventiva en febrero de 2014 (13.550.830 euros) ya cubría cualquier interpretación que se pueda realizar sobre la retención a aplicar sobre este pago.

En su auto, el instructor no acepta de momento abrir una pieza separada por el delito fiscal del ejercicio 2014. Es decir, lo incluye en el procedimiento que ya afecta al expresidente Sandro Rosell y al Barça como persona jurídica. Al primero le imputa dos delitos fiscales (2011 y 2013) y uno societario, y al club tres delitos fiscales.

En un informe remitido el lunes al juzgado, el fiscal José Perals cuantificó en 12,1 millones el dinero no pagado en impuestos por el fichaje de Neymar. El Barça abonó 82,8 millones, por lo que el coste real del delantero hubiera ascendido a 94,9 millones.

Ante la petición del lunes de la Fiscalía, el Barça mostró horas antes de la imputación su "sorpresa, indignación y total desacuerdo" e insistió en que los últimos meses el club ha proclamado su inocencia "aportando toda la documentación solicitada en numerosas ocasiones y reforzada en el transcurso de diversos testimonios judiciales".

"Sorpresa" e "indignación"

"En este caso, la petición de imputación está relacionada con un pago de cinco millones de euros, el último plazo de los 40 millones que el club estaba obligado a pagar a la sociedad N&N por el fichaje del jugador", asegura el club.

El Barça informa de que el pago se realizaría el 31 de enero de 2014, ocho días después de que se produjera el relevo presidencial tras la dimisión de Sandro Rosell.

"La decisión de diferir este último pago a enero de 2014 y la discusión sobre qué tipo de retención fiscal se tenía que aplicar a este pago no parecen razones suficientes para solicitar la imputación", según considera el Barça.

El club asegura que la declaración complementaria presentada de forma cautelar y preventiva en febrero de 2014 (13.550.830 euros) ya cubría cualquier interpretación que se pueda realizar sobre la retención a aplicar sobre este pago.