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David de Gea, en una gran intervención en el Sánchez Pizjuán.

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David de Gea, en una gran intervención en el Sánchez Pizjuán. Reuters

El Sevilla se gana seguir soñando

En un partido abrupto, sin demasiada calidad, los hispalenses fueron superiores en distintas etapas a un United que tuvo a De Gea como figura

Luis F. GAGO

Sevilla

Miércoles, 21 de febrero 2018, 08:50

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Vuelve el Sevilla a unos octavos de final de la Champions League por cuarta vez en su historia en su actual formato. Será este miércoles (20.45 horas, Sánchez-Pizjuán) frente al Manchester United. En las tres ocasiones anteriores cayó frente a rivales en teoría asequibles, Fernerbahçe, CSKA de Moscú y Leicester, mientras que ahora se enfrenta a un contrario de gran caché donde por vez primera los sevillistas no serán los favoritos. Visita en la ida el Sánchez-Pizjuán un viejo conocido de la liga española, José Mourinho, al frente a los ‘red devils’, heredero de los rojiblancos en el trono de la Europa League la temporada pasada. El equipo andaluz no ha vuelto a meterse entre los ocho mejores de Europa desde su debut en la máxima competición continental de clubes en la temporada 1957/1958, cuando cayó en esa fase ante el Real Madrid (8-0, 2-2).

«Ahora estamos en un buen momento y debemos aprovecharlo, aunque sea contra un equipo que es de los mejores de la Premier. Es una oportunidad perfecta para pasar a cuartos y hacer historia»

sergio escudero

Ahora se enfrentan rey y delfín en la máxima competición continental con los locales intentando resarcirse tras un inicio de campaña dubitativo. Tras la marcha de Berizzo y la llegada de Montella, en la planta noble de Nervión hay un halo de esperanza de cara a esta eliminatoria. Cuando fue el sorteo nadie entre los directivos hispalenses daba un porcentaje mínimo a favor del Sevilla en el pase a cuartos. El equipo estaba roto y desde la parcela técnica la división con el vestuario era importante. En enero el nuevo técnico sevillista apostó por un once ideal más un par de refuerzos que le fueron prometidos en la reunión que mantuvieron Oscar Arias, actual director deportivo, y el propio Montella en tierras milanesas.

Esta apuesta ha sido un acicate para los intereses sevillanos. La mejora en Liga cada vez es más notoria y la clasificación para la final Copa del Rey ha servido para despertar la alegría dentro de una plantilla demasiado depresiva para el coste total y la calidad que tiene. «Ahora estamos en un buen momento y debemos aprovecharlo, aunque sea contra un equipo que es de los mejores de la Premier. Es una oportunidad perfecta para pasar a cuartos y hacer historia», aseveró Escudero en la rueda de prensa de este martes previa al encuentro para ejemplificar la unidad que existe en el vestuario alrededor del nuevo entrenador. «Pese a que estamos en un racha positiva, necesitamos jugar a un nivel superior que en los partidos contra el Atlético», matizó el preparador transalpino en la misma rueda de presa para aclarar que los estados de ánimo en el mundo del fútbol solo son un cincuenta por ciento de los choques, ya que los componentes de intensidad y suerte juegan al mismo nivel.

Por ello, también será necesario golpear primero en la ronda eliminatoria. Estos octavos, en palabras de todos los protagonistas, se dirimirá en el ‘Teatro de los sueños’ en la vuelta, empero dar un paso al frente con la afición rojiblanca respaldando al equipo siempre será un plus a favor de los locales. «Hasta yo cantaré el himno, así que tenemos que ponernos a punto», concluyó Montella para hacer un último llamamiento a la hinchada para intentar hacer historia. A la cuarta debe ir la vencida.

El salto del United

Enfrente tendrá a unos ‘diablos rojos’ que buscan subir un escalón más esta temporada, en la que el técnico José Mourinho ya ha dado por perdida la carrera por la Premier, a 16 puntos del líder. Lejos de los cuartos de final desde 2014 ahora la corona europea, que logró por última vez en 2008, se perfila como un gran objetivo. Llegan a Sevilla con varias dudas. Marcos Rojo, Phil Jones, Marouane Fellaini y Zlatan Ibrahimovic parece que no podrán estar pero sí Marcus Rashford y Ander Herrera, que no jugaron los dos últimos encuentros, así como Antonio Valencia.

«Somos un gran equipo, con grandes jugadores, defensivamente somos muy fuertes, tenemos jugadores arriba muy rápidos, con mucha calidad y que tienen mucho gol. Esas son nuestras mejores bazas»

DE GEA

Eric Bailly apunta al once como Alexis que regresa a la Champions y será la referencia junto a Lukaku. «Somos un gran equipo, con grandes jugadores, defensivamente somos muy fuertes, tenemos jugadores arriba muy rápidos, con mucha calidad y que tienen mucho gol. Somos un equipo compacto, fuerte y esas son nuestras mejores bazas», avisó David de Gea en UEFA.

Presentó el Ramón Sánchez-Pizjuán el aspecto de gala de sus mejores noches europeas. Era la ida de los octavos de final y el baile era con uno de los ‘cocos’ del viejo continente. El Manchester United visitaba tierras andaluzas para aspirar a los cuartos de final ante una de las ‘cenicientas’ que quedaban aún tras la fase de grupos. El Sevilla, con la esperanza e ilusión del que ha sido invitado muchas veces con los mayores pero nunca ha dado la talla. En el primer enfrentamiento, que acabó en tablas, lo técnico desde los respectivos banquillos superó a lo deportivo que jugaba sobre el terreno de juego. Un empate a cero que contentó a los ingleses, pero no tanto a los españoles, que merecieron vencer con nítida diferencia pero se estrellaron ante David de Gea.

El Sevilla saltó al césped sevillano con la intención de repetir hazañas pasadas. Recordando cómo llegó a la final de Copa en su momento más difícil de la temporada, el técnico sevillista quiso repetir jugada. No se arriesgó con el once titular, puso a aquellos que más confianza le daban sin miedo a que muchos, como Banega y Correa, hayan estado entre algodones hasta 24 horas antes del inicio del choque. En el bando contrario, decidió Mourinho ser fiel a su estilo de estratega en su visita al Pizjuán. Sacó un once distinto, diferente a lo que había estado ensayando durante un par de semanas. Bien fuera por despistar a esa prensa que nunca siente como amiga o por las dudas musculares de varios hombres de su extensa lista de estrellas, lo cierto es que antepuso la eficacia goleadora y el contragolpe al músculo sobre el tapete. McTomnonay suplió a Pogba, mientras que Mata hizo lo propio con Martial. Dos piezas del ajedrez luso que puso en jaque durante la primera media hora lo programado por Montella.

Fuera del plano estratégico todo quedó para lo deportivo. Ahí la jugada laberíntica que tenía pensada Mourinho se le nubló al cuarto de hora del pitido inicial. Fue el tiempo que tardó Ánder Herrera en tirarse al suelo y pedir el cambio. El riesgo de los dos entrenadores con las lesiones musculares de sus hombres recayó de forma negativa en el lado portugués. La entrada de Pogba parecía que volvía a otorgar una apuesta por ganar el medio del campo, empero dio más alas a la fuerza ofensiva del Sevilla. La primera mitad acabó en empate a cero gracias a un nombre: David de Gea. El portero de los ‘diablos rojos’ salvó a sus compañeros de una victoria momentánea hispalense. Con dos paradas en el tramo final de la primera mitad demostró por qué media Europa le sigue los pies para la próxima campaña.

Sevilla

Sergio Rico, Jesús Navas, Lenglet, Mercado, Escudero, Banega (Pizarro, min. 90), Nzonzi, Sarabia, Vázquez, Correa, Muriel (Sandro, min. 85).

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Manchester United

De Gea, Valencia, Lindelof, Smalling, Young, Matic, Ánder Herrera (Pogba, min. 15), McTomonay, Mata (Martial, min. 80), Lukaku y Alexis (Rashford, min. 75).

  • ÁRBITRO: Clement Turpin (Francés). Amonestó con tarjeta amarilla N’Zonzi y Alexis.

  • INCIDENCIAS: Partido de ida de octavos de final de la Liga de Campeones. Ambientazo en el Sánchez-Pizjuán.

Realizó el cancerbero español una soberbia actuación, sobre todo ante un cabezazo de Muriel a dos metros de distancia, que levantó incluso la admiración de la grada rojiblanca. Los sevillistas se marcharon a los vestuarios con sensación agridulce. Ante uno de los gigantes de Europa consiguieron mantener una actuación honrosa, pero al mismo tiempo sus méritos le hicieron acreedores de algún gol en su haber. Para la reanudación, el United adelantó líneas e intentó finiquitar la eliminatoria por la vía rápida para no encontrarse con problemas en la vuelta. Sin embargo, de nuevo fue el Sevilla el que gozó de las mejores ocasiones, aunque con más corazón que cabeza en muchos tramos.

Mientras Mourinho realizaba cambios que intentaran darle cierta ventaja, Montella jugó casi todo el duelo con los mismos once jugadores de inicio. Tardó 85 minutos en realizar el primer cambio y el cansancio hizo mella en la parte final. El empate sin goles final deja al equipo español con la esperanza intacta y la ilusión por las nubes frente a un Manchester que demostró como visitante ser más cobarde que la valentía que enseña su cartera fiscal. Todo queda para la vuelta.

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