Valencia se moja por el triatlón

El asfalto mojado se convirtió en un rival más peligroso que el cronómetro para los participantes del Triatló del Marítim. Unas 1.300 personas se dieron cita ayer en la primera sede del Santander Triathlon Series con epicentro en la playa de la Malvarrosa.

Los atletas, sobre todo los populares, sufrieron las consecuencias de la lluvia especialmente en el tramo de ciclismo, el más sensible a las inclemencias metereológicas. La policía local tuvo que atender a 24 personas e incluso realizó dos traslados al hospital. «Precaución», era el mantra más repetido entre los participantes, voluntarios y acompañantes que observaron la carrera en bicicleta.

Emilio Aguayo (1:57:16) e Inma Masia (2:22:56) fueron los más rápidos en distancia olímpica. El triatleta del Avant Moncada cumplió con los pronósticos, ya que partía como favorito y no defraudó, puesto que desde el primer segmento dominó la prueba, por delante de Mathieu Rincent (2:05:20) y Sergio Torres (2:05:24). El podio femenino en la categoría lo completaron Silvia Valero (2:23:07) y Marta Fernández de Castro (2:25:38).

El equipo de l'Horta Nord también logró el primer puesto en categoría sprint con la victoria del joven Diego Robles (1:02:40), quien terminó por delante de Germán Alcalá (1:04:29) y Alberto Romero (1:04:52). En la cita también se pudo competir en distancia supersprint y en individual, relevos, parejas, 123 y Triatlón para Nosotras. En esta última modalidad participaron Ana y María, ambas del equipo de Marta Fernández de Castro, a quienes la natación les pareció «la prueba más dura» de la jornada. «Ha sido nuestra primera competición y la hemos disfrutado mucho», comentaron satisfechas las atletas.

En zona de boxes y una vez completada la prueba, los participantes reflexionaban sobre una experiencia que algunos como Joan tildaban de «única». Era la tercera vez que este triatleta de Sueca participaba en una prueba aunque nunca la había vivido como ayer: «Ha sido muy duro, debíamos ir con mucho cuidado en el tramo de bicicleta y ha provocado que pese a ser un trazado llano, haya subido mi marca pero no me importa, porque ha sido una gran experiencia». No estaba solo, ya que contó con el apoyo de tres amigos a los que tampoco les importó mojarse por su amigo: «Es divertido y muy emocionante», comentaban.

También emocionado se encontraba Juan Luis Muñoz Escassi. El empresario andaluz ayer completó el primero de los diez triatlones que conforman el reto que se ha marcado para su objetivo de recaudar 6.600 euros en beneficio de la Fundación Luis Olivares de Málaga que tiene como objetivo ayudar a los niños con cáncer.

La próxima cita del circuito será el 18 y 19 de junio en Madrid, la sede más numerosa con unos 4.000 participantes. Una cifra a la que Valencia espera llegar e incluso superar en ediciones futuras. Y después la prueba volverá de nuevo a la Comunitat Valenciana para visitar Castellón el 3 de julio.